LIMA 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Perú, Alan García, y el de Bolivia, Evo Morales, suscribieron este martes el tratado conocido como 'Boliviamar' que permitirá a este país hacer uso del puerto de Ilo, en el sureste peruano, como respuesta a las demandas de La Paz de contar con una salida al océano Pacífico.
Con esta rúbrica los mandatarios relanzaron un proyecto que, a pesar de haber sido suscrito en 1992 por ambos países, no se había aplicado debido a las fluctuantes relaciones entre Lima y La Paz, enfrentados en los últimos años en la arena política.
Además, dicho acuerdo constituye una respuesta a las históricas reivindicaciones de Bolivia que desde finales del siglo XIX, al término de la llamada Guerra del Pacífico, exige una salida al mar para impulsar el desarrollo de su comercio.
"Este acuerdo acerca a Bolivia hacia la recuperación de una salida al mar con soberanía gracias a la voluntad del Gobierno y pueblo peruanos", dijo Morales, al tiempo que advirtió de que "Bolivia va a retornar tarde o temprano con soberanía a las costas del Pacífico, porque es algo irrenunciable".
Este tratado concede a Bolivia facilidades ampliadas de tránsito por el puerto de Ilo para atracar embarcaciones, así como una zona de costa con playas turísticas y deportivas que podrá ser utilizada por el país por un periodo de 99 años.
"Sólo nos falta la soberanía marítima, aunque sabemos que esa solución no es responsabilidad de Perú, estos acuerdos abren a Bolivia la puertas intercontinentales para el comercio mundial", anotó el líder indígena en declaraciones recogidas por la Agencia Boliviana de Información (ABI).
Por su parte, García consideró que este pacto pone fin a "las rencillas" entre países evidenciando la "fecunda amistad" que comparten. Así, manifestó su apoyo a Bolivia en en sus demandas territoriales.
"Es la última vez que ambos daremos la espalda al mar (...) Perú jamás será un obstáculo para que Bolivia acceda con soberanía al Pacífico", indicó el dirigente al tiempo que calificó de "injusto" el hecho de que no cuente con una salida al océano.