BRUSELAS, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha llamado este lunes al cese de la violencia contra los manifestantes que se han movilizado en los últimos días en Kiev en protesta por la decisión del Gobierno de aparcar las relaciones con la Unión Europea en favor de Rusia, al tiempo que ha descartado adoptar sanciones contra este país en respuesta a la violencia.
"La (posibilidad) de sanciones no es algo que discutamos ahora", ha dicho en rueda de prensa una portavoz del Ejecutivo comunitario, quien ha explicado que por el momento la UE "observa la situación" y "condena con firmeza el uso excesivo de la fuerza" ejercida por las autoridades ucranianas contra los manifestantes.
También la Alta Representante de Política Exterior y Seguridad Común, Catherine Ashton, y el comisario de Vecindad y Ampliación, Stefan Füle, criticaron este fin de semana el "excesivo" uso de la fuerza en Kiev e instaron al Gobierno de Viktor Yanukovich a respetar sus compromisos internacionales para con la libertad de expresión y de asamblea.
Sobre la posición del Ejecutivo comunitario frente a la represión y el papel del Gobierno, la portavoz de la Comisión Pia Ahrenkilde ha precisado que "no se pide la dimisión de nadie" desde Bruselas, sino que se expresa una "condena contundente de la violencia" e insta a las autoridades a respetar los derechos y libertades de los ciudadanos.
Además, Ahrenkilde ha dejado claro que "teniendo en cuenta los acontecimientos" no se contempla la firma de un acuerdo de asociación con Ucrania -cuyas negociaciones ha elegido suspender Kiev--, pero también ha pedido que no se pierdan los progresos que se habían logrado hasta la fecha.
"Cuando las condiciones sean las adecuadas, estaremos dispuestos a sentarnos de nuevo a la mesa", ha explicado la portavoz, que también ha subrayado que los criterios y exigencias para cerrar un acuerdo con Ucrania "no han cambiado" y que si se cumplen será posible dicho acuerdo.