SOFÍA, 25 Jul. (Reuters/EP) -
Bulgaria ha señalado a un ciudadano canadiense y a otro australiano como sospechosos de la explosión de un autobús que causó la muerte de cinco israelíes y su conductor en el aeropuerto de Burgas, una localidad búlgara situada en la costa del Mar Negro, hace un año, y que las autoridades sostienen que fue obra del partido-milicia chií libanés Hezbolá.
El ministro del Interior búlgaro, Tsvetlin Yovchev, ha identificado al ciudadano australiano Meliad Farah --también conocido como Hussein Hussein-- de 32 años, y al canadiense Hassan El Hajj Hassan, de 25 años como sospechosos del atentado. Yovchev ha mostrado fotografías de los dos hombres, ambos de origen libanés, y ha solicitado a la ciudadanía cualquier información sobre sus paraderos.
"Las autoridades búlgaras solicitan al público cooperación sobre estas dos personas, que se cree que están involucradas en el ataque terrorista", ha afirmado el ministro en un comunicado. Según Yovchev, los sospechosos fueron avistados en varias ciudades búlgaras entre el 28 de junio y el 18 de julio del año pasado.
Bulgaria ha extendido su investigación sobre el atentado hasta el próximo mes de noviembre tras interrogar a más de 150 personas y reconstruir el ataque, que tuvo lugar en julio de 2012 y que además hirió a otras 30 personas. La bomba fue accionada por un terrorista suicida que falleció en el ataque y que no ha podido ser identificado pese a que los investigadores han encontrado muestras de ADN en sus dedos.
La Unión Europea añadió esta semana a la rama militar de Hezbolá en su lista de organizaciones terroristas, en respuesta a su supuesta implicación en este atentado y por su intervención en la guerra civil siria, lo que permitirá congelar sus activos financieros bajo jurisdicción europea. Por su parte, Hezbolá niega cualquier implicación en el atentado de Burgas.
Este lunes, el ministro de Exteriores Kristian Vigenin aseguró que Bulgaría había recibido un informe proporcionado por Estados Unidos, en el que se incluían datos adicionales que conectaban a los supuestos autores del acto terrorista con Hezbolá.