MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Oficina Especial de la Comisión Nacional de los Dderechos Humanos mexicana que investiga el caso Ayotzinapa ha afirmado este lunes que Julio César Mondragón murió a causa de un traumatismo cráneo-encefálico y no a causa de un disparo de arma de fuego, tal y como se indicó en un primer informe.
El caso Ayotzinapa hace referencia al incidente ocurrido en la localidad de Iguala el 26 de septiembre de 2014 en el que desaparecieron 43 estudiantes normalistas de la Escuela Rural de Ayotzinapa y, tras enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, otros seis estudiantes murieron y 17 resultaron heridos. Los jóvenes estaban manifestándose en contra de una reforma educativa.
El cadáver de Mondragón fue encontrado al día siguiente en Iguala con la piel de la cara arrancada, algo que causó una gran conmoción. Ahora, un nuevo informe médico ha precisado que su muerte se debió a un traumatismo producido con un objeto contundente con extremo angular, pero que la falta de piel en la cara no se debió a la acción humana sino que fue provocada por un animal, según ha informado el periódico.
Esto contradice una primera versión planteada por el Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes (GIEI), que aseguró que sus investigaciones estaban siendo obstaculizadas desde diferentes ámbitos.