LONDRES, 26 Nov. (Reuters/EP) -
El primer ministro británico, David Cameron, ha defendido este jueves que ha llegado el momento de tomar una decisión de sumarse a los bombardeos aéreos contra el grupo terrorista Estado Islámico en Siria, argumentando que Reino Unido no puede "subcontratar su seguridad a otros países".
"Por eso creo que deberíamos tomar ahora la decisión de ampliar los bombardeos aéreos británico contra Estado Islámico a Siria, como parte integral de nuestra estrategia integral para degradar a Estado Islámico y reducir la amenaza que plantea para nosotros", ha escrito en una respuesta a la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento.
Cameron quiere que los diputados respalden esta petición, al contrario de lo que sucedió en 2013, cuando rechazaron autorizar al Gobierno a bombardear en Siria. Para ello, necesita persuadir a varios de los miembros de su propio Partido Conservador y algunos diputados del opositor Partido Laborista.
La Comisión de Exteriores del Parlamento criticó este mes ampliar los bombardeos aéreos a Siria, afirmando que sin una estrategia clara para derrotar al grupo terrorista y acabar la guerra civil tal acción era "incoherente".
Pero desde que Estado Islámico reivindicó la responsabilidad de los atentados de París en los que murieron 130 personas, algunos diputados que eran reacios a lanzar nuevos bombardeos en Siria parecen más inclinados a apoyar la medida con el fin de proteger a Reino Unido de este tipo de ataques.
"No podemos permitirnos el lujo de ser capaces de esperar hasta que el conflicto sirio se resuelva antes de abordar a Estado Islámico", ha sostenido Cameron en respuesta a las objeciones de la comisión parlamentaria.
En su escrito de 24 páginas, el primer ministro ha defendido que la campaña contra Estado Islámico está entrando en una nueva fase, centrada en el mando y el control, las líneas de suministro y el apoyo financiero, algo a lo que Reino Unido podría contribuir bien.
"Es equivocado que Reino Unido subcontrate su seguridad a otros países y que espere que la aviación de otros países cargue con el peso y los riesgos de golpear a Estado Islámico en Siria para frenar el terrorismo aquí en Reino Unido", ha sostenido.
Cameron tendrá que convencer a los parlamentarios de que ampliar los bombardeos aéreos no significará que Reino Unido se convierta en un objetivo aún mayor para atentados. En la votación de agosto de 2013, 30 diputados conservadores votaron en contra de la moción para la intervención militar en Siria.
El líder laborista, Jeremy Corbyn, un veterano pacifista, también ha dicho que es reacio a apoyar los bombardeos sin un plan político para Siria, por temor a que más bombardeos compliquen aún más la guerra civil.
POSIBLE LIBERTAD DE VOTO LABORISTA
El responsable de finanzas de los laboristas, John McDonnell, ha dicho este jueves que podrían dar libertad de voto a sus diputados en este asunto. "En estos momentos estamos considerando eso dentro del Partido Laborista y llegaremos a una decisión democrática", ha declarado a la BBC.
"En este tipo de cuestiones de conciencia, es mejor permitir a los parlamentarios que decidan por ellos mismos", ha opinado. Sin embargo, McDonnell ha expresado que sigue siendo "profundamente escéptico" respecto a una implicación de Reino Unido en Oriente Próximo. "Creo que tenemos que aprender las lecciones de lo que ocurrió en Irak, así que yo parto de esa posición", ha afirmado.