'El Chapo' resultó herido al caer a un pequeño acantilado tras ser perseguido por las fuerzas especiales

MÉXICO DF, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -

El narcotraficante mexicano Joaquín Guzmán Loera, alias 'El Chapo', resultó herido en la cara y en la pierna al caer a un pequeño acantilado tras ser perseguido por las fuerzas especiales del Ejército mexicano, según han informado a la cadena estadounidense CNN fuentes cercanas a la investigación.

El Gobierno de México confirmó recientemente que el líder del Cártel de Sinaloa quedó herido a principios de octubre en una "huida precipitada" para evitar ser capturado, en el marco de un operativo desarrollado por las fuerzas de seguridad mexicanas en el noroeste del país, pero no aportó más detalles al respecto.

Las fuentes consultadas por la CNN han añadido que 'El Chapo' se encontraba con una niña cerca del pueblo de Cosalá, localizado en el estado de Sinaloa, por lo que las autoridades decidieron no emprender un operativo de captura debido a la posibilidad de que se desatara un tiroteo.

"Después, el prófugo fue visto sin la niña, tras lo cual fuerzas especiales comenzaron a perseguirlo a pie. Durante la persecución, Guzmán Loera cayó en un pequeño acantilado, donde se cree que se rompió una pierna y se causó heridas en el rostro", detalla la cadena estadounidense.

Los sicarios de 'El Chapo' habrían rescatado al líder 'narco' y le habrían conseguido ocultar entre la espesa vegetación de la zona, facilitando su huída. Las fuerzas especiales del Ejército mexicano se encontrarían en el lugar sin apoyo aéreo ni de vehículos terrestres, según la misma fuente.

El criminal fue ubicado entre las localidades de Cosalá y Tamazula, después de la captura de Héctor Ramón Takashima, el piloto que lo transportó desde el centro del país hasta el estado de Sinaloa tras su fuga de la prisión de alta seguridad de 'El Altiplano', ha concluido la fuente consultada por CNN.

'El Chapo', uno de los criminales más buscados del mundo, logró fugarse el pasado 11 de julio de una prisión de máxima seguridad situada en el centro de México, a través de un túnel que salía de la ducha de su celda y recorría 1,5 kilómetros de largo --con 50 centímetros de ancho-- hasta llegar a una vivienda cercana a la cárcel.