SANTIAGO 18 Nov. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
Un chileno que estaba en calidad de detenido desaparecido durante la dictadura de Augusto Pinochet ha reaparecido y se encuentra sano y salvo con su familia después de 35 años, tiempo en el que sus parientes no sólo celebraron un funeral con sus supuestos restos óseos, sino que además recibieron beneficios del Estado por ser víctimas de violaciones a los Derechos Humanos.
El caso fue revelado por la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), cuya presidenta, Lorena Pizarro, puso los antecedentes a disposición del Gobierno y de la justicia para iniciar una investigación.
Germán René Cofré Martínez tenía 28 años y era militante del Partido Comunista en el momento de desaparecer, después de haber sido arrestado por militares en 1973. La semana pasada regresó a Chile, según anunció su hijo, quien informó del caso a la AFDD.
Cofré, quien estaba casado y tenía dos hijos pequeños cuando fue arrestado, estuvo durante estos 35 años viviendo en Argentina, donde incluso renovó su DNI en varias ocasiones en el consulado chileno, trámite que realizó por última vez en 2002, sin que las autoridades repararan en que se trataba de un "detenido desaparecido".
Como muchas otras familias que sufrieron la desaparición de sus familiares, tras presentar los antecedentes ante las comisiones que investigaron las violaciones de Derechos Humanos durante la dictadura, los parientes de Cofré recibieron beneficios del Estado, como pensiones y becas, por ser víctimas del régimen de Pinochet.
Incluso, las autoridades les entregaron los supuestos restos óseos de Cofré que habrían sido detectados e identificados en el Patio 29 del Cementerio General de Santiago, lugar donde los militares inhumaron ilegalmente a cientos de arrestados que están en calidad de detenidos desaparecidos. Tras varios años de penurias y de pasar por una difícil situación económica, la esposa del Cofré murió sin saber que su marido seguía con vida.
IRREGULARIDADES
El hombre, quien habría argumentado ante su familia que no informó de que vivía y tampoco regresó a Chile porque consideró que no se daban las suficientes condiciones de seguridad, permanece junto a parientes en una residencia de la zona sur de Santiago y no ha hecho ninguna declaración.
A este respecto, la presidenta de la AFDD manifestó su molestia por el caso y dijo que la organización que preside decidió revelarlo para impedir que una situación como ésta ponga en duda la realidad de los más de 3.000 detenidos desaparecidos causados por la dictadura. "No vamos a permitir que alguien enlode nuestra tragedia, la de los detenidos desaparecidos", señaló.
Por su parte, el juez Carlos Gajardo, quien investiga el caso del Patio 29, informó hoy de que no ha interrogado a Cofré, que se están realizando investigaciones para determinar su identidad y que, a su juicio, esta situación "no desacredita en modo alguno el proceso de investigación es un hecho insólito, pero nada más que eso".
En La Moneda, el ministro portavoz del Gobierno, Francisco Vidal, manifestó que la situación "es lamentable" y anunció una investigación para averiguar "por qué fallaron todos los que fallaron".