NUEVA YORK, 4 Ene. (Reuters/EP) -
El número de visados que concede Estados Unidos a familiares de inmigrantes que están residiendo legalmente en el país ha sido este año el más bajo en la última década, conforme a las nuevas directrices de la Administración de Donald Trump, que ha señalado a la llamada "cadena migratoria" como una amenaza a la seguridad nacional.
De acuerdo con una revisión que ha hecho Reuters de los datos de los Servicios de Inmigración y Ciudadanía de Estados Unidos (USCIS), en los primeros nueve meses de 2017 se aprobaron unas 406.000 visas familiares (I-130s) frente a las 530.000 que se autorizaron en el mismo periodo del año anterior, a pesar de que el número de solicitudes fue similar.
La reducción es aún mayor en el caso de quienes piden un visado I-130s sin ser familiares directos de quienes ya están viviendo en Estados Unidos. Ha caído un 70 por ciento, pasando de 108.000 en los primeros nueve meses de 2016 a 32.500 entre enero y septiembre de este año.
Esta caída en la concesión de visados familiares coincide con la llegada de Trump a la Casa Blanca. El presidente estadounidense prometió en campaña electoral que combatiría la inmigración ilegal y ya en el Gobierno ha ampliado la ofensiva a todo tipo de inmigración.
Trump ha cargado contra la "cadena migratoria" que generan los I-130s porque permiten "traer a decenas de personas" cuyo vínculo con el residente legal en Estados Unidos es solo "una relación distante" sin que haya "criterios reales de selección".
Sin embargo, los solicitantes de visados familiares no los obtienen probando solo su parentesco, sino que tienen que pasar unos controles de seguridad que pueden prolongarse años.
Los USCIS, por su parte, han desvinculado la reducción del número de visados I-130s del Gobierno Trump. Según su nuevo director, L. Francis Cissna, se trata de una fluctuación normal que ha atribuido a que están priorizando la gestión de los visados para los que hay más plazas disponibles.
No obstante, ha reconocido que los USCIS están escrutando más detenidamente cada solicitud. "Esta gente viene solo en base a una conexión familiar (...) Esta falta de criterios de selección nos aparta de hacia dónde queremos ir como país", ha espetado, en una entrevista telefónica con Reuters.