ROMA, 7 Jul. (EUROPA PRESS/Gloria Moreno) -
El comisario para los Derechos Humanos del Consejo de Europa, Thomas Hammarberg, ha pedido al Gobierno italiano que aclare la situación en que se encuentran alrededor de 250 ciudadanos eritreos, algunos de ellos solicitantes de asilo, que actualmente se hallan detenidos en Libia tras haber intentado entrar en Italia por vía marítima.
El pasado 2 de julio Hammarberg mandó una carta al ministro de Interior italiano, Roberto Maroni, y otra al de Exteriores, Franco Frattini, cuyo contenido fue dado hoy a conocer por el organismo internacional.
En ellas, el comisario dice haber recibido "informes" en los que se afirma que a finales de junio los inmigrantes fueron trasladados a un centro de detención de Sebha, donde la policía militar libia les habría tratado con "violencia, dejando a varios de ellos seriamente heridos".
"Dada la decisión tomada por las autoridades libias de suspender las actividades del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) en el país, cada vez es más difícil confirmar la certeza de estas acusaciones", razón por la que "el comisario pide a las autoridades italianas que clarifiquen la situación con las autoridades libias", detalló el Consejo de Europa a través de un comunicado.
El año pasado, Italia y Libia llegaron a un acuerdo para impedir que los inmigrantes que zarpan de este país africano lleguen a las costas europeas. Sin embargo, esta medida fue criticada tanto por los partidos de la oposición como por el Vaticano, la ONU y numerosas ONG ya que supone la violación del derecho de muchos inmigrantes a pedir refugio o asilo político a los países europeos, a lo que se suman las condiciones infrahumanas en que muchas veces se ven obligados a vivir en Libia.
Tras la publicación de las cartas de Hammarberg, el Partido Demócrata (PD), que es la principal formación de la oposición italiana, anunció que pedirá explicaciones al Gobierno en el Parlamento sobre este tema.
Por su parte, Italia de los Valores aplaudió la intervención del comisario para los Derechos Humanos del Consejo de Europa y denunció el "innoble e inhumano silencio de los ministros Maroni y Frattini" sobre "la masacre de eritreos" en Libia", cuyo objetivo sería "no importunar los acuerdos económicos entre el dictador libio y nuestro 'dictadorcillo'", en alusión a Gadafi y Berlusconi, respectivamente.