LA HABANA, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, Ricardo Alarcón, advirtió este jueves de que será "imposible" normalizar las relaciones con Estados Unidos hasta que Washington no libere a los cinco agentes cubanos presos desde hace más de una década por cargos de espionaje.
Así lo comentó Alarcón en declaraciones a la cadena estadounidense CNN en Español después de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazara el pasado lunes atender una apelación presentada por los conocidos como 'los cinco' para que su juicio se repita fuera de Miami, ya que alegan falta de objetividad del jurado en una ciudad que es el principal bastión de los exiliados anticastristas.
"Yo creo que es inconcebible, imposible, imaginar una relación normal entre Estados Unidos y Cuba mientras nuestros cinco compañeros permanezcan en prisión", señaló Alarcón respondiendo a las palabras del presidente norteamericano, Barack Obama, quien ha hablado de "relanzar" las relaciones entre Washington y La Habana.
Como gesto de buena voluntad, la Administración Obama ha eliminado recientemente las restricciones a los viajes y envíos de remesas de los cubano-estadounidenses a la isla. Además, ha propuesto reanudar las conversaciones migratorias interrumpidas en 2003 por su antecesor, George W. Bush.
A este respecto, Alarcón subrayó que las conversaciones entre ambos países sobre asuntos como la migración pueden avanzar, pero no el diálogo político. "Mientras Estados Unidos pretenda seguir favoreciendo a los terroristas contra nuestra patria, es sencillamente imposible", insistió.
Cuba sostiene que los conocidos como 'los cinco', que fueron arrestados en 1998 en Miami, no espiaban objetivos estadounidenses. Su misión, según Alarcón, era infiltrar a grupos violentos de exiliados cubanos para prevenir futuros atentados contra la isla. Los agentes fueron condenados en 2001 a largas penas de prisión.
ALEGAN JUICIO "TENDENCIOSO"
Antes del juicio, los abogados de la defensa intentaron llevar el caso a un tribunal de la ciudad de Fort Lauderdale, también en el estado de Florida, pero lejos del bastión de la oposicion al régimen de los Castro.
Los letrados sostuvieron que el sentimiento anticastrista en la comunidad cubana de Miami llenaría al jurado de "hostilidad" y lo volvería "tendencioso" en detrimento de los acusados. Como ejemplo citaron la intensa publicidad que antecedió al juicio.
Pero el juez que presidió este caso dictaminó que los acusados no habían podido demostrar que sería virtualmente imposible tener un juicio justo en Miami. Un tribunal de apelaciones también rechazó después las reclamaciones de los cinco cubanos. Ahora el Supremo lo ha vuelto a rechazar.