MADRID 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
El disidente y ex preso político cubano Ariel Sigler Amaya, que desde hace un día se encuentra en Miami para recibir tratamiento médico por su delicadísimo estado de salud, afirmó que su salida de Cuba "es sólo un hasta pronto".
Sigler, que recibió permiso del Gobierno cubano para viajar a Estados Unidos para recibir tratamiento, afirmó que por el momento su idea es permanecer en Miami hasta que se resupere de las múltiples lesiones y enfermedades que padece tras más de siete años en cárceles de la isla.
Sin embargo, afirmó que su intención es volver a Cuba cuando desaparezca el Gobierno de los hermanos Castro, al que pronosticó una duración muy corta. "Yo sé que firmé mi salida definitiva (de Cuba). Pero yo soy un patriota. Yo quiero irme a Cuba. Mi salida fue sólo un hasta pronto", afirmó Sigler en conversación telefónica con Europa Press desde el hospital Jackson Memorial de Miami donde se encuentra ingresado.
Sigler afirmó que aún no ha decidido si pedirá asilo político en Estados Unidos para instalarse allí definitivamente. Por el momento se encuentra en dicha país porque le fue concedido un visado humanitario para que recibiera tratamiento, y que expirará dentro de nueve meses.
En cuanto a su estado de salud, Ariel afirmó que en sólo un día de estancia en Miami se encuentra "prácticamente igual" que en Cuba, si bien su estado de ánimo ha mejorado por el hecho de encontrarse con su familia y "en una patria libre, en una democracia".
Sigler afirmó que en un plazo de entre uno y tres días los médicos le darán su diagnóstico médico, pero que por el momento le están haciendo diferentes pruebas para calibrar su estado de salud.
El disidente fue excarcelado el pasado día 12 de junio por parte del Gobierno cubano como parte del acuerdo alcanzado entre éste y la Iglesia católica --con la mediación diplomática adicional de países como España-- para liberar a 52 presos políticos cubanos.