PEKÍN 12 Mar. (Reuters/EP) -
Las autoridades de China han detenido formalmente este jueves a cinco activistas de los derechos de las mujeres, aparentemente por planear manifestarse contra el acoso sexual en el transporte público, allanando el camino para que la Policía presente cargos formales contra ellas.
La detención de las mujeres es el último acontecimiento en un caso que ha generado la censura de las organizaciones de Derechos Humanos internacionales y pone de manifiesto una amplia campaña por el presidente chino, Xi Jinping, de aplastar la disidencia entre los académicos, periodistas y activistas sociales.
Las mujeres habían fabricado carteles y pegatinas con eslóganes como "stop al acoso sexual" y pidiendo a la Policía que se detuviera a los acosadores, según las fotos que han difundido grupos de Derechos Humanos. Las mujeres, que proceden de tres ciudades, están recluidas en un centro de detención en Pekín, han informado los abogados de tres de ellas por teléfono.
"Esto es completamente irracional", ha afirmado Wang Qiushi, abogado de una de ellas. "Ninguna de ellas ha violado la ley", ha añadido.
Las mujeres planeaban manifestaciones en Pekín y en la ciudad de Guangzhou, en el sur, durante el fin de semana con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se celebró el 8 de marzo. Inicialmente fueron detenidas a última hora del 6 de marzo junto con otros activistas que posteriormente fueron liberados tras ser interrogados.
No se habían presentado cargos formales, pero habían eran sospechosas de "provocar disputas y problemas", según los abogados, un cargo que las autoridades han usado en el pasado para encarcelar a disidentes políticos.
Un activista próximo a dos de las mujeres ha indicado a Reuters que la Policía había alertado a muchos otros activistas en contra de realizar manifestaciones el Día de la Mujer, que coincidió con la sesión anual del Parlamento, un periodo sensible para el Gobierno.
Yan Xin, otro abogado que representa a una de las mujeres, dijo que había conocido los detalles de del caso tras reunirse con su cliente este jueves. La Policía del distrito de Haidian de Pekín, donde están detenidas, no ha hecho comentarios.
"Es espeluznante que mujeres que piden a la Policía que investigue acoso sexual acaben siendo objetivos", ha lamentado William Nee, de Amnistía Internacional, en un comunicado.