COPENHAGUE, 30 Oct. (Reuters/EP) -
El inventor danés Peter Madsen, propietario del submarino donde supuestamente perdió la vida la periodista sueca Kim Wall, ha admitido por primera vez que descuartizó a la joven, aunque mantiene que no fue el responsable de su muerte y que Wall falleció de forma accidental.
La Policía de Dinamarca ha informado en un comunicado de que Madsen cambió su versión durante un interrogatorio celebrado el 14 de agosto. Entonces, negó que Wall cayese inconsciente al ser golpeada por la escotilla --como alegó en una primera versión-- y aseguró que había fallecido por inhalar monóxido de carbono.
El inventor afirmó que descuartizó a la periodista, de 30 años, una vez muerta, y que arrojó los restos del cadáver al mar. Los cargos contra él, sin embargo, incluyen no sólo la mutilación del cuerpo sino también el asesinato.
La Policía también ha informado este lunes de que al pliego de cargos se añadirán el de abusos sexuales, habida cuenta de que en los genitales de Wall se encontraron 14 heridas --interna y externas--.
Wall perdió la vida en agosto, cuando realizaba un reportaje sobre Madsen y su submarino 'Nautilus'. El 23 de agosto, la Policía confirmó que un torso de mujer hallado en Copenhague correspondía con el de la periodista y este octubre se localizaron la cabeza y las piernas.
El inventor ha aceptado de forma voluntaria la petición de la Fiscalía para que siga en prisión provisional al menos hasta el 15 de noviembre, según su abogado. Por tanto, no comparecerá este martes ante el juez como estaba previsto.