MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
La embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Nikki Haley, ha denunciado este lunes la inacción del presidente de República Democrática del Congo (RDC), Joseph Kabila, en el caso del asesinato en marzo de 2017 de dos expertos de la ONU en la región de Kasai Central.
Haley ha subrayado que durante su encuentro con Kabila en octubre de 2017 le entregó "una lista" con reclamaciones. "Pregunten a Kabila qué hizo con mi lista. Le di una lista, y no se han tomado medidas", ha dicho.
"Esta lista es lo que sabemos que tiene que analizar, y es una lista seria en referencia a la muerte de esas dos personas", ha manifestado, en referencia a la sueca Zaida Catalan y el estadounidense Michael Sharp.
El Ejército de RDC detuvo a finales de diciembre al jefe de la localidad de Moyo Mushuila por su presunta responsabilidad en el secuestro y asesinato de los dos expertos de la ONU.
En noviembre, la Justicia sueca acusó a las autoridades de RDC de no cooperar de forma adecuada en la investigación en torno al suceso, lamentando que se hayan registrado pocos avances en la investigación.
En este sentido, la fiscal Sara Nilsson dijo que la cooperación con las autoridades congoleñas ha sido insuficiente, añadiendo que la investigación congoleña "no cumple requisitos básicos sobre certeza legal" y que "incluye defectos básicos en asuntos clave".
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, nombró en noviembre al canadiense Robert Petit como director del equipo de expertos que apoyará la investigación judicial en RDC del asesinato de Catalan y Sharp.
El proceso judicial sobre el asesinato de Catalan y Sharp arrancó en junio con la recusación de la defensa del tribunal militar que se encarga del caso. Ambos desaparecieron en marzo en Kasai Central cuando investigaban abusos en el marco de los enfrentamientos en la región.
La fiscalía militar congoleña afirmó en mayo que dos presuntos milicianos harían frente a cargos por el caso, si bien varias organizaciones no gubernamentales han apuntado a la posible participación de las fuerzas de seguridad en el suceso.
En agosto, el grupo de expertos de la ONU en RDC resaltó que las circunstancias del suceso no habían sido esclarecidas.
La ONU y las autoridades congoleñas han localizado numerosas fosas comunes en la región. El Gobierno acusa de las matanzas a los rebeldes, si bien organizaciones internacionales han apuntado a miembros de las fuerzas de seguridad como participantes en algunas de ellas.
EL PROCESO ELECTORAL
Por otra parte, Haley ha recalcado que "no puede haber otro retraso" en la celebración de las presidenciales en el país africano, previstas para diciembre de 2018. El mandato de Kabila expiró en diciembre de 2016.
La comisión electoral de RDC anunció a el 31 de enero que concluyó el registro de votantes para los próximos comicios, en los que se pondrá fin a la era de Kabila, y la semana pasada su portavoz, Lambert Mende, aseguró que no va a presentarse a las elecciones.
La comisión "trabaja para garantizar que las elecciones tengan lugar el 23 de diciembre", según dijo el jefe del organismo, Corneille Nangaa, que tiene entre sus cometidos coordinar un proceso marcado desde antes de su inicio por las tensiones políticas y sociales.
Estas tensiones se recrudecieron después de que Kabila, que ocupa la Presidencia desde 2001, se negase a renunciar al cargo una vez que había expirado formalmente su actual mandato en diciembre de 2016.
Los constantes retrasos han sumido el país en el caos y en la violencia política, que se ha cobrado las vidas de decenas de personas y causado que partes del país hayan acabado en manos de insurgentes que han amenazado con seguir la lucha hasta que el presidente abandone el poder.
"Los responsables de retrasar las elecciones no pueden argumentar la falta de una 'hoja de ruta' para las elecciones ni la falta de claridad de los objetivos de la 'hoja de ruta'", ha subrayado Haley, incidiendo en que "el acuerdo del 31 de diciembre (de 2016), la Constitución y el calendario electoral establecieron un proceso claro".
Así, ha aplaudido las recientes palabras de Mende sobre la decisión de Kabila de no presentarse a la reelección, afirmando que "es un paso significativo hacia una transición pacífica de poder en RDC".
Haley ha vuelto a condenar "las acciones represivas del Gobierno y el excesivo uso de la fuerza" durante las últimas manifestaciones en el país, recordando que "al menos trece personas han muerto durante los últimos dos meses" a causa de la represión de las protestas.
"No podemos tener miedo a la hora de aplicara presión sobre el Gobierno, la comisión electoral y la oposición para garantizar que el pueblo congoleño logra la transición de poder pacífica y democrática que merece", ha remachado.