WASHINGTON, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno estadounidense aseguró este miércoles que "no es el momento de levantar el embargo" impuesto a Cuba en 1962, a pesar de que una abrumadora mayoría de países de la ONU respaldó este miércoles aprobar una resolución del Gobierno de la isla para condenar el bloqueo económico y financiero en la Asamblea General de la ONU, un ejercicio anual que para el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ian Kelly, responde a "una especie de inercia de la Guerra Fría".
"No creemos que ha llegado el momento de levantar el embargo. Lo consideraremos cuando el Gobierno de Cuba empiece a dar algunos pasos positivos para aliviar la represión de su propio pueblo", explicó el portavoz este miércoles en rueda de prensa, tras la votación en la Asamblea General de la ONU.
Kelly explicó que "las sanciones" impuestas por Washington a la isla "están diseñadas para permitir que bienes humanitarios llegen al pueblo cubano a la vez que se deniega al Gobierno cubano los recursos que podría utilizar para reprimir a sus ciudadanos".
"Seguimos centrados en la necesidad de que haya mejoras en las condiciones de los derechos humanos y el respeto por las libertades fundamentales en Cuba y necesitaríamos ver mejoras en estas áreas antes de que podamos normalizar las relaciones con La Habana", precisó.
"Nuestra política hacia Cuba está diseñada para intentar hacer que Cuba haga lo que es correcto para sus propios ciudadanos y no han dado todavía el tipo de pasos que nos demuestren que están dispuestos a abrir su sociedad y a abrir sus economía y hasta que no hagan estas cosas no están dispuestos a cambiar su política. No obstante, también queremos tener un diálogo productivo", agregó.
Preguntado por qué Estados Unidos sigue defendiendo su política de bloqueo, que dura ya 47 años a pesar de que no ha contribuido a dar resultados positivos, el portavoz del Departamento de Estado justificó que "es mucho tiempo para tener un sistema represivo" en la isla y criticó duramente las votaciones que todos los años desde 1992 se producen en la Asamblea General de la ONU a petición de Cuba para que este organismo internacional exprese su condena al bloqueo.
"Este ejercicio anual en la ONU ensombrece el hecho de que Estados Unidos es la primera fuente de alimentos y ayuda humanitaria a Cuba. En 2008, Estados Unidos exportó productos agrícolas, equipos médicos, medicinas, madera y bienes humanitarios por valor de 717 millones de dólares" (484,7 millones de euros), explicó, al ser preguntado por el respaldo mayoritario de 187 países de la ONU a favor de condenar el bloqueo, frente a los tres contrarios emitidos por Estados Unidos, Israel y Palau, los mismos que en 2008.
Además, el portavoz recordó que desde la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca la nueva administración ha dado pasos hacia Cuba como el lenvatamiento de las restricciones a las visitas de familiares a la isla y al envío de remesas, para promover el libre intercambio de información y a la hora de ampliar la lista de bienes y productos humanitarias que se pueden donar a Cuba.
Asimismo, las partes han retomado a nivel técnico en materia de inmigración y para el restablecimiento del correo postal directo entre ambos países. "Estamos intentando colocar nuestra relación con Cuba en una senda más productiva", explicó.
"La sugerencia de que no estamos asistiendo a Cuba es simplemente falsa. Somos uno de los mayores proveedores de asistencia humanitaria a Cuba, pero no creemos que, mientras hay medidas represivas en Cuba, debiéramos recompensar al Gobierno de Cuba levantando las sanciones que pueden ayudar al Gobierno de Cuba a reprimir a sus propios ciudadanos", concluyó, al ser preguntado por la postura de la nueva administración de Barack Obama ante el respaldo mayoritario en la ONU a favor del levantamiento del bloqueo.
La votación del miércoles en la ONU fue la décimooctava ocasión en que la ONU condena las sanciones contra Cuba --aunque de forma no vinculante--, una votación en la que Cuba consiguió añadir dos apoyos más contra el bloqueo con respecto a 2008, cuando el embargo fue condenado por 185 naciones, frente a tres votos en contra.
Esta es la primera vez que la ONU pide a Estados Unidos levantar el bloqueo desde que Obama asumió la Presidencia de Estados Unidos en enero de este año, prometiendo dar un nuevo giro a las relaciones con el Gobierno cubano mediante la flexibilización de algunas medidas.
El Estado cubano ha denunciado que, en los casi 50 años de vigencia, el embargo económico ha provocado pérdidas en la isla de 96.000 millones de dólares (64.000 millones de euros) en todos los sectores sociales y económicos, especialmente en lo que se refiere a la producción de alimentos, educación y servicios médicos.