El presidente vuelve a defender la solución de los dos estados para terminar con el conflicto árabe-israelí
NUEVA YORK, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente estadounidense, Barack Obama, trasladó a todas los musulmanes en Estados Unidos y en el extranjero sus mejores deseos en el comienzo del mes del Ramadán, la conmemoración de la revelación del Corán al profeta Mahoma, en un discurso en el que, en el panorama internacional, defendió "inquebrantablemente" la solución de los dos estados para el conflicto entre israelíes y palestinos, y, en términos generales, la colaboración entre estados de ambos credos en todos los ámbitos políticos, económicos y sociales dentro de "un nuevo principio" en estas relaciones.
"Ramadan Karim (Bendito Ramadán)", deseó Obama a los musulmanes en el discurso pronunciado la noche de ayer y con el que el presidente desea que sirva para "recordar los principios" que cristianos y musulmanes comparten, así como "el papel del Islam en el avance de la justicia, el progreso, la tolerancia y la dignidad de los seres humanos".
El presidente hizo alusión a su "propia fe cristiana" para explicar los conceptos religiosos que comparten ambos credos. "Hay entre nosotros personas que no pueden dar por sentada su próxima comida" y destaca el trabajo común realizado por organizaciones de caridad tanto cristianas como musulmanas, unidas por "un espíritu de comunidad que es necesario mantener en los próximos meses y años".
RESPONSABILIDAD INTERNACIONAL
Obama resaltó el "compromiso" de su país a la hora de mantener su "responsabilidad para construir un mundo más pacífico y seguro". "Por ello estamos terminando de una manera responsable la guerra en Irak, por eso estamos aislando a los extremistas violentos", declaró el presidente, quien realizó una mención especial al conflicto árabe-israelí al expresar su compromiso con la creación de un futuro estado palestino.
"Nos mostramos inquebrantables en nuestro apoyo para una solución biestatal que reconozca los derechos de israelíes y palestinos para vivir en paz y seguridad", declaró el presidente, que llamó a un "nuevo principio" entre Estados Unidos y la comunidad musulmana mundial, cimentado en un incremento de la actividad diplomática.
"Durante los dos últimos meses, las embajadas estadounidenses de todo el mundo han intentado llegar al pueblo que conforma los países de mayoría musulmana. Hemos recopilado vuestras opiniones. Os hemos escuchado, y al igual que vosotros, nos centramos en conseguir objetivos específicos que marcarán la diferencia" con el paso del tiempo, declaró Obama.
Esta ronda de consultas, según el presidente, servirá para poner en práctica el gran número de proyectos de cooperación por los que abogó en su histórico discurso de acercamiento pronunciado en El Cairo, el pasado 4 de junio, entre los que se incluye la ampliación de programas educativos de intercambio, la colaboración empresarial, científica y tecnológica, el apoyo de las técnicas de aprendizaje vocacional y finalmente, proyectos de cooperación en la lucha contra las enfermedades, con mención especial a la gripe A.
"Deseo mantener este diálogo tan absolutamente importante, y ponerlo en acción. Y hoy quiero unirme a los 1.500 millones de musulmanes, sus amigos y sus familias, para dar la bienvenida al comienzo del Ramadán, y desearos un mes bendito", concluyó el presidente.