La directora de la organización señala que la expulsión de EEUU "no es cuestión de fondos, sino de valores"
PARÍS, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
El embajador de Estados Unidos ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), David Killion, ha manifestado que está "trabajando incansablemente" para conseguir que el país vuelva a cumplir con sus cuotas a la organización, cuyo impago motivó que ayer se le retirara el derecho a voto, junto a Israel.
La retirada de fondos de EEUU e Israel obedece a la entrada de Palestina como miembro de la organización hace dos años, lo que supone un reconocimiento internacional que el Estado hebreo no está dispuesto a admitir hasta que fructifiquen las conversaciones de paz bilaterales con los palestinos.
Estados Unidos justificó su decisión de cancelar la financiación a la UNESCO en octubre de 2011 con el argumento de que la legislación estadounidense prohíbe aportar fondos a agencias de Naciones Unidas que reconozcan a Palestina como un estado.
Israel adoptó la misma postura que Estados Unidos en respuesta a lo que consideró que era un intento de los palestinos por conseguir unilateralmente el reconocimiento de su estado.
Israel y Estados Unidos no dieron ninguna explicación oficial de su decisión de dejar impagadas las cuotas de la UNESCO antes de que se cumpliera este viernes a las 11.00 horas (12.00 hora peninsular española) el plazo para informar sobre su decisión y sus planes para abonar los pagos, lo que ha provocado que queden suspendidos sus derechos.
A pesar del compromiso expresado por el embajador de EEUU durante la conferencia bianual de la organización, celebrada en París, la directora general de la UNESCO, Irina Bokova, ha declarado que el motivo de la expulsión de EEUU y de Israel "no es cuestión de fondos, sino de valores", según declaró en la misma conferencia.
La ausencia de fondos de EEUU ha supuesto un durísimo golpe a la economía de la UNESCO, que ha perdido 240 millones de dólares al año, un 22 por ciento de su presupuesto, lo que ha obligado al recorte de programas e iniciativas.
Por este motivo, Bokova reiteró en muchos momentos de su discurso "la enorme pérdida" que representa la ausencia de Estados Unidos, un aliado y socio "a la hora de ayudar a que fructificara la misión y las ambiciones de la UNESCO".
Sin embargo, la retirada del derecho a voto "no solo está relacionada con la financiación, sino con los valores". "Hoy en día necesitamos 'potencias inteligentes' para poner los cimentos de la paz y del desarrollo sostenible", declaró la directora general de la UNESCO.
"Hoy en día es inconcebible que no podamos contar con el compromiso de todos los Estados en esta era de rápido cambio, y de profunda interdependencia, en esta era de globalización y vulnerabilidad", manifestó.