MADRID, 9 Nov. (EDIZIONES)
La victoria del candidato republicano, el multimillonario Donald Trump, en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos no se entiende sin la mayoría que el partido 'elefante' ha obtenido en nueve de los trece estados llamados 'bisagra', marcados por un electorado lo suficientemente dividido como para presentar un escenario cuanto menos incierto antes de la apertura de los colegios electorales.
Lo cierto es que la jornada de votaciones se abría con unos sondeos recientes que apuntaban de forma insistente a una victoria ajustada de la demócrata Hillary Clinton, unos datos que el propio Trump no tardó en tildar de "falsos", convencido de su triunfo en los comicios.
Real Clear Politics, una de las empresas de investigación y sondeos más reputadas de los Estados Unidos, ofrecía solo un día antes del inicio de la votación una encuesta que vaticinaba un contexto más que igualado en estos estados 'bisagra', con un Trump victorioso en siete de ellos, por cinco de Clinton y un empate en New Hampshire.
UN GOLPE A TRES ESTADOS IMPREVISTOS
El gran golpe de los republicanos a estos pronósticos tiene como epicentros a los estados de Michigan, Pensilvania y Wisconsin, donde se apuntaba a una victoria demócrata, mientras Hillary Clinton solo podía 'robar' Nevada a los sondeos favorables a su adversario y romper la igualdad en New Hampshire.
De este modo, y además de estos tres territorios, Donald Trump también logró ser el más votado en Arizona, Florida, Georgia, Iowa, Carolina del Norte y Ohio, que ya figuraban previsiblemente en sus manos. Mientras Clinton solo pudo hacerse con Colorado y Virginia, además de los dos anteriormente citados de Nevada y New Hampshire.
El resultado en estos trece estados clave es notablemente distinto al que se registró en las últimas elecciones presidenciales de 2012, en las que la candidatura demócrata, por aquel entonces liderada por Barack Obama, fue la más votada en Florida, Iowa, Michigan, Ohio, Pensilvania y Wisconsin; todos ellos son ahora parte importante del triunfo de Donald Trump, el nuevo presidente del país.