ANKARA, 11 Oct. (Reuters/EP) -
El Ministerio de Asuntos Exteriores turco ha convocado este jueves al embajador de Rusia en Ankara, según han informado fuentes del Ministerio. Unas horas antes, las autoridades turcas habían ordenado el aterrizaje de un avión de pasajeros sirio que estaba volando de Moscú a Damasco porque sospechaban que podría estar transportando material militar.
Moscú ha acusado a Ankara de poner en peligro la vida de los ciudadanos rusos que iban a bordo de la aeronave por ordenar que fuese interceptado por aviones de combate turcos.
Los aviones de combate escoltaron el Airbus A-320 --en el que había unos 30 pasajeros-- hasta el aeropuerto de Ankara este miércoles por la noche, después de que Turquía dijera que había recibido informaciones de los servicios de inteligencia según las cuales el aparato transportaba suministros militares.
Pero la directora de la aerolínea nacional Syrian Arab Airlines, Ghaida Abdulatif, ha asegurado que el avión "no transportaba ningún material ilegal". "Cuando fue inspeccionado el avión, quedó claro que había paquetes de uso civil con equipos eléctricos, cuyo transporte está permitido, y que habían sido registrados oficialmente", ha añadido en declaraciones a periodistas.
Según los medios turcos, el aparato transportaba equipos de comunicación militares y posibles componentes de misiles, un cargamento "no civil" y, por tanto, prohibido por las normas de navegación. Finalmente, el avión sirio pudo emprender su rumbo a Damasco, aunque, al parecer, el cargamento "no civil" fue decomisado.
Viacheslav Davidenko, portavoz de Rosoboronexport, la empresa de exportación de armas rusa, ha declarado: "No llevávamos ningún cargamento en ese avión".
"Siempre entregamos nuestras armas cumpliendo todas las normas internacionales", ha subrayado Davidenko, que ha recordado que "transportar armas en un avión de pasajeros sería incumplir todas las leyes sobre exportación de armas".
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, afirmó el pasado junio que su país no enviaba a Siria armas que pudieran ser utilizadas en un conflicto civil como el que se desarrolla actualmente en el país árabe.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha pedido una explicación a las autoridades turcas por la interceptación y ha indicado que no permitieron que diplomáticos rusos hablaran con los 17 ciudadanos rusos que había en el avión.
"Rusia insiste en que las autoridades turcas le expliquen las razones que motivaron esas acciones", ha dicho el Ministerio en un comunicado, en el que critica que se pusieran en peligro "la vida y la seguridad" de los pasajeros.