KOS (Grecia), 12 (Reuters/EP)
El Gobierno griego ha reforzado este miércoles la seguridad en la turística isla de Kos para hacer frente al flujo de inmigrantes, un día después de que los recién llegados se enfrentasen con la Policía y el Ejecutivo se comprometiese a aliviar la difícil situación ante la llegada diaria de cientos de personas a sus costas.
El ministro de Estado griego, Alekos Flabouraris, ha explicado que el Gobierno enviará un barco con una capacidad para al menos de 2.500 personas a Kos, la cual ha experimentado un repunte de llegadas en las últimas semanas. El buque se convertirá en un centro de recepción para procesar las llegadas y atracará en el puerto principal de la isla, ha concretado el ministro.
Atenas también ha enviado dos unidades de Policía antidisturbios y efectivos de refuerzo desde las islas cercanas, según las autoridades. Flabouraris ha asegurado que el Gobierno está haciendo todo lo posible para acabar con los problemas a los que Kos se está enfrentando.
El martes, se produjeron escaramuzas en un centro de acogida improvisado en un polideportivo. Los enfrentamientos estallaron en una de las dos puertas cerradas cuando un grupo de 40 personas intentó entrar. Los antidisturbios lanzaron una granada de gas lacrimógeno para dispersar a la gente y empujaron a los inmigrantes para que se quedaran en una estrecha fila frente a una oficina de registro.
Cientos de personas, incluidos niños, continúan encerrados en el recinto deportivo bajo temperaturas abrasadoras, esperando los papeles que les permitan viajar. Un testigo ha señalado que no tienen ni comida ni agua.
HUYEN DE LA GUERRA
Decenas de miles de personas han cruzado a Grecia, que se encuentra sumida en su peor crisis económica desde hace décadas, desde la costa de Turquía. Las tiendas de campaña se alinean en el paseo marítimo desde el principal puerto de Kos. Se han notificado casos de acoso por parte del personal privado de seguridad, ha alertado Médicos Sin Fronteras (MSF).
"Las autoridades de Kos han dejado claro que no tienen intención de mejorar la situación de estas personas ya que creen que eso supondría un efecto llamada", ha criticado el jefe de operaciones de MSF, Brice de le Vingne. "Pero la realidad es que la gente que huye de la guerra seguirá viniendo tanto si las autoridades intentan detenerlas como si no", ha asegurado.
Un portavoz de la Guardia Costera ha afirmado que más de 200 inmigrantes han sido rescatados en Kos en las últimas 24 horas.