JERUSALÉN, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Autoridad Palestina y el movimiento islamista Hamás han lamentado al unísono que el juez Richard Goldstone, encargado de investigar posibles violaciones del Derecho Internacional durante la operación 'Plomo Fundido' contra la Franja de Gaza, haya indultado a Israel de las conclusiones de su propio informe final --en el que se determina que tanto el Estado hebreo como Hamás cometieron crímenes de guerra-- y acusara al Consejo de Derechos Humanos de la ONU de actuar "de manera prejuiciosa" contra los israelíes.
Para el ministro de Exteriores de la Autoridad Palestina, Riyad Al Maliki, el informe Goldstone "está tan claro como los crímenes que Israel perpetró durante la guerra" de 2008-2009, según comentó en respuesta al artículo de opinión firmado por el juez y publicado el pasado viernes en el 'Washington Post'.
En dicha columna, Goldstone lamenta la escasa cooperación que recibió de ambas partes a la hora de redactar el informe, pero hace especial hincapié en que si hubiera conocido los resultados de la posterior investigación israelí --y por la que se Tel Aviv se autoexime de cualquier acto criminal que hubiera podido perpetrar durante el conflicto--, los resultados "hubieran sido distintos", Además, llega a asegurar que el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas actuó de forma "prejuiciosa" contra Israel en el momento de ordenar la investigación.
Por su parte, el político palestino y ex candidato a la Presidencia, Mustafá Barghouti, se mostró convencido de que Goldstone "todavía cree" en las conclusiones de su informe y, si bien admitió que Hamás cometió crímenes de guerra al disparar cohetes contra áreas civiles israelíes, mantuvo que Israel contestó con "una fuerza desproporcionada" que se cobró la vida de entre 1.100 y 1.400 palestinos --295 de ellos civiles, según Israel; 926 según ONG palestinas--. Trece israelíes --10 soldados y tres civiles-- fallecieron durante el conflicto.
Este punto precisamente fue abordado por Goldstone en su columna de opinión, donde el juez subrayó que si bien fueron "pocos" los israelíes muertos por cohetes y ataques de mortero lanzados desde Gaza, este hecho "no minimiza la criminalidad" de la "vil" acción perpetrada por el movimiento islamista.
"Siempre he tenido claro que Israel, como otras naciones soberanas, tiene el derecho y la obligación de defenderse a sí misma y de que sus ciudadanos también lo hagan contra los ataques", apuntó Goldstone.
Por su parte, el portavoz de Hamás, Sami Abú Zuhri, aseguró que "la retractación" de Goldstone "no cambia el hecho de que se cometieron crímenes de guerra contra la población de Gaza" y mantiene que el grupo palestino "colaboró completamente con Goldstone" durante el proceso de investigación y recogida de datos del informe, según declaraciones recogidas por el diario israelí 'Jerusalem Post'.
Los comentarios de Goldstone tampoco obtuvieron el beneplácito del ex primer ministro israelí y jefe del Ejecutivo durante el conflicto, Ehud Olmert, quien indicó que la retractación "llega demasiado tarde, después de que el daño estuviera hecho". "No necesitamos que él nos diga que nosotros actuamos de acuerdo con el Derecho Internacional", indicó el ex primer ministro.
A la luz de las declaraciones de Goldstone, el actual primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió a Naciones Unidas que repudiara públicamente los resultados de un informe "que debería acabar en la papelera de la Historia". "El hecho de que Goldstone se haya desvinculado de sus propias conclusiones debería terminar en la retractación final de este informe de una vez por todas", añadió en comentarios recogidos por el diario 'Yedioth Aharonoth'.