NUEVA YORK 29 Jun. (del corresponsal de EUROPA PRESS, Emilio López Romero) -
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró este lunes que lo ocurrido este fin de semana en Honduras es un golpe de Estado "ilegal" que le recuerda a los "tiempos oscuros" vividos en la región, tras lo cual subrayó que Manuel Zelaya sigue siendo el presidente legítimo del país centroamericano.
Así lo aseguró Obama en declaraciones a los periodistas en una breve comparecencia conjunta con el mandatario colombiano, Alvaro Uribe, después del encuentro de trabajo que mantuvieron ambos esta tarde (noche en España) en la Casa Blanca.
Obama afirmó que si no se da marcha atrás al golpe de Estado en Honduras se sentará un "terrible precedente" en la región, y se comprometió a trabajar con la Organización de Estados Americanos (OEA) para restaurar en el poder a Zelaya.
Previamente, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, aseguró que la principal prioridad de Washington en estos momentos es que se restaure el orden constitucional en Honduras, aunque no quiso confirmar si la Casa Blanca suspenderá la ayuda que ofrece a Tegucigalpa.
"Los desafortunados sucesos en Honduras son una prueba de fuego para la habilidad del sistema interamericano de apoyar y defender la democracia y el orden constitucional en el hemisferio", indicó la jefa de la Diplomacia estadounidense.
Así, tras subrayar que la Administración Obama ya está trabajando con sus socios de la OEA para alcanzar por consenso una condena a la detención y expulsión del presidente Zelaya y para llamar a que se respete el orden constitucional en Honduras.
En los mismos términos se expresó el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, en su habitual rueda de prensa diaria en la que afirmó que Obama no se ha puesto en contacto con Zelaya desde que se consumó el golpe de Estado el domingo.