MADRID 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de China, Wen Jiabao, ha criticado este viernes la actitud de Irán con su programa nuclear y le ha instado a que no fabrique armas nucleares, en unas declaraciones realizadas en el sexto día de su gira por Oriente Próximo y preocupado por las consecuencias que pueda contraer una escalada de las tensiones con Teherán en la ingente importación de crudo iraní.
En Doha, la capital qatarí, Wen ha aseverado que China "se opone diametralmente al desarrollo y la posesión de armas nucleares por parte de Irán"
Estos inusuales comentarios sí han sido bien recibidos por sus homólogos árabes, que han urgido a la comunidad internacional a frenar el programa nuclear iraní y el creciente poder regional del régimen de Teherán.
No obstante, durante su visita, Wen ha llegado a afirmar que las cuestiones diplomáticas y las energéticas son asuntos que deben abordarse de forma separada, puesto que las sanciones impuestas al sector petrolífero podrían suponer graves problemas de suministro a China: Irán es el tercer principal proveedor de crudo de Pekín.
Sin embargo, Wen ha reincidido en sus advertencias al régimen de Mahmud Ahmadineyad y ha reclamado a Irán que no cierre el estrecho de Ormuz, el cuello de botella situado en el golfo Pérsico y a través del cual circula un quinto del crudo mundial. El 'premier' chino ha asegurado que tal acción sería considerada como una agresión contra la mayor parte de las naciones mundiales, según ha recogido el diario estadounidense 'The New York Times'.
REINICIO DE LAS NEGOCIACIONES
Asimismo, las autoridades chinas han transmitido a una delegación iraní que ha visitado al gigante asiático que la vuelta a las conversaciones sobre el programa nuclear es una "prioridad máxima" para China.
Los representantes de Irán han estado liderados por el vicesecretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, Alí Baqeri.
"China piensa que el asunto nuclear de Irán debe ser resuelto de forma pacífica a través del diálogo y las negociaciones, y que las sanciones y los medios militares no hacen frente al problema", ha afirmado el 'numero dos' del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wu Hailong.
En declaraciones a la agencia de noticias china Xinhua, Wu ha sostenido que Irán "ha expresado su disposición a reanudar las conversaciones" a seis bandas en el marco del "fortalecimiento de la cooperación" con la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).
Estas declaraciones constituyen un primer cambio de rumbo desde Pekín para con la cuestión iraní, ya que, con anterioridad, China ha rechazado pronunciarse sobre las sanciones y el presunto fin militar del programa nuclear impulsado por Teherán. Durante las últimas semanas las tensiones entre Irán, Estados Unidos e Israel, quien no termina de descartar emprender un ataque unilateral, ha reiniciado las gestiones diplomáticas a favor de una resolución pacífica del conflicto con la participación de la AIEA, clave en los informes que verifiquen el verdadero objetivo de las instalaciones nucleares establecidas en Irán.