MADRID, 4 Nov. (EDIZIONES) -
Liverpool es la primera ciudad del mundo que está probando durante esta semana la eficacia de unas vías rápidas para caminar por las aceras en una avenida de gran tránsito. Una medida cuyo objetivo es el de que compradores impacientes puedan transitar rápidamente por la calle para que puedan acceder a los comercios con mayor celeridad.
Los carriles se encuentran pintados en la concurrida calle comercial St. John, en pleno centro de la ciudad inglesa, para que los viandantes puedan acelerar entre las grandes multitudes que, a diario, pasean por esta avenida.
Se trata de una solución que responde a las demandas del 47 por ciento de la nación, que afirma sentirse molesta cuando ve a gente caminando con lentitud por las calles más transitadas y que son, por lo general, las que tienen tiendas de alta gama. Por esta razón, la tienda Argos ha impulsado esta idea pintando en el pavimento estos carriles en una calle que se asienta el conocido complejo comercial de tres pisos 'Liverpool One'.
Al igual que en su día se abrieron carriles para la circulación de bicicletas ahora esta nueva alternativa pretende facilitar el acceso de compradores impacientes y con prisa a los comercios.
El plan está respaldado principalmente por la población joven mientras que la mayoría de las personas mayores difieren con esta medida, según las encuestas recogidas por el diario Independent, que revelan la existencia de compradores que "odian" abrirse camino entre las multitudes que se paran frente a escaparates o en medio de la vía siendo impedimento para clientes con prisa.