GINEBRA 5 Jul. (Reuters/EP) -
Más de 50 países han urgido este jueves al Gobierno de Nicolás Maduro a permitir la entrada de ayuda humanitaria a Venezuela para paliar el desabastecimiento de productos de primera necesidad, como comida y medicamentos, así como a restaurar el Estado de Derecho, que consideran roto desde la instauración de la Asamblea Constituyente hace un año.
"Instamos a Venezuela a reconocer la gravedad de su situación y a abrir sus puertas a la ayuda humanitaria, a cooperar con los mecanismos del Consejo de Derechos Humanos", ha dicho el embajador peruano en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Claudio Julio de la Puente Ribeyro, que ha leído una declaración conjunta.
A este respecto, el diplomático británico Bob Last ha indicado que, si bien la asistencia técnica que puedan proporcionar el propio Consejo o sus miembros no resolverá todos los problemas humanitarios en Venezuela, "sería un buen comienzo".
Los países firmantes han expresado igualmente su "preocupación" por "las graves violaciones de los Derechos Humanos, que incluyen ejecuciones extrajudiciales, uso excesivo de la fuerza, detenciones arbitrarias, tortura y malos tratos y falta de acceso a la Justicia".
Los representantes de Venezuela, Bolivia y Cuba han interrumpido reiteradamente a De la Puente Ribeyro esgrimiendo cuestiones burocráticas para impedir que continuara leyendo el manifiesto, pero el presidente del Consejo de Derechos Humanos, el embajador esloveno Vojislav Suc, ha permitido que continuara.
"Estamos preocupados por que los países que hablan sobre politización son realmente los que están politizando los debates impidiendo que un grupo de países haga declaraciones", ha reprochado la emisaria mexicana en Ginebra, Socorro Flores Liera.
Interrogado por este ofensiva sobre Venezuela, Leila Swan, de Human Rights Watch (HRW), ha aplaudido la declaración conjunta porque "llega en un momento crítico" justo cuando la nación caribeña "está entrando en una espiral descendente de la que no se ve el final".
"El creciente coro de preocupación internacional evidencia la necesidad de seguir informando y actuando ante el Consejo de Derechos Humanos hasta que Venezuela cese la brutal campaña contra su propio pueblo", ha considerado la portavoz de la ONG.