LA PAZ, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha llegado este miércoles a La Paz, después de pasar 13 horas retenido en Viena ante la negativa de los gobiernos de Francia, Portugal e Italia a dejar que su avión cruzara su espacio aéreo por la sospecha de que el ex agente de Inteligencia de Estados Unidos Edward Snowden iba a bordo.
El avión presidencial ha aterrizado a las 23.30 horas del miércoles (5.30 horas del jueves en España) en el Aeropuerto Internacional de El Alto, en los alrededores de La Paz, después de 18 horas de vuelo, en las que ha hecho una parada técnica en Brasil.
Morales ha sido recibido por la mayoría de los miembros del Gobierno, por una banda militar y por cientos de personas, a pesar de las bajas temperaturas que se registran en esta época del año en La Paz, según la Agencia Boliviana de Información (ABI).
El líder indígena ha ofrecido un breve discurso en el que ha reiterado que su incidente en Europa obedece a "un intento de amedrentamiento por parte del imperio (Estados Unidos)", no solo contra Bolvia, sino contra toda la región.
"Pero nunca nos van a intimidar, nunca nos van a asustar, porque ahora somos un pueblo con dignidad y soberanía (...) Ya no somos un pueblo de colonias", ha dicho, en declaraciones recogidas por la cadena panamericana TeleSur.
En la misma línea, ha considerado que "algunos países europeos deberían liberarse ya del imperio norteamericano". "No estamos en época de colonias", ha insistido.
Además, ha expresado su "enorme satisfacción" por "el apoyo del pueblo boliviano y de los mandatarios de la región". "Demuestra que hay un profundo sentimiento por la liberación de los pueblos del mundo", ha celebrado.
RETENIDO EN EUROPA
Ayer, Morales estuvo retenido durante más de 13 horas en un aeropuerto de Viena porque su avión tuvo que realizar un "aterrizaje de emergencia" ante la negativa de Francia, Portugal e Italia a dejarle cruzar su espacio aéreo o hacer paradas técnicas, a pesar de que ya se habían obtenido los permisos necesarios para ello.
El ministro de Exteriores, David Choquehuanca, reveló que "después de algunas explicaciones de algunas autoridades (de estos países) nos informamos de que había algunas sospechas infundadas de que el señor Snowden estaba en el avión".
Choquehuanca negó rotundamente que el ex espía fuera en el avión de Morales. "No sabemos quién se ha inventado esta soberana mentira. Nosotros no podemos mentir a la comunidad internacional y llevar pasajeros fantasma", zanjó.
Tras horas de confusión, Francia, Portugal e Italia recularon y dejaron vía libre al avión de Morales, que tuvo que hacer una parada técnica en el aeropuerto de Gran Canaria, desde donde ha partido rumbo a Bolivia.
Morales ha denunciado que las autoridades españolas han intentado registrar su avión --a pesar de que cuenta con inmunidad internacional--, algo que el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha negado rotundamente.
El Gobierno boliviano ha considerado que este incidente es un "atentado" contra Morales, ya que se ha puesto en peligro la vida del líder indígena. Los países latinoamericanos han cerrado filas en torno a La Paz y han condenado la actitud de Europa.
Está previsto que en las próximas horas se reúnan en la ciudad Boliviana de Cochabamba los países de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) para adoptar una postura común sobre este asunto, que han interpretado como una ofensa regional.