MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, confirmó anoche que todos los embajadores europeos acreditados en Honduras han sido retirados del país por sus respectivos Gobiernos. Así, a España y Francia se suma la salida de los embajadores de Alemania, Italia y la Comisión Europea.
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, el jefe de la diplomacia española adelantó que toda la representación europea en Honduras estará representada "a un nivel inferior" en el país. "Es una señal muy clara de la posición europea, de la comunidad internacional, y las autoridades provisionales --del país latinoamericano-- tendrán que reflexionar y cuando llegue el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, buscar una salida que pasa por el restablecimiento del orden constitucional", explicó.
En este sentido, el titular de Exteriores precisó que "a partir" de ese restablecimiento constitucional será posible "el diálogo y la reconciliación nacional". "Pero antes y como precondición --precisó-- tiene que ser el presidente constitucional, Manuel Zelaya, el que vuelva a ser presidente de Honduras".
Moratinos indicó también que el Gobierno interino liderado por Roberto Micheletti no ha intentado ponerse en contacto con el Ejecutivo español y, advirtió, "mejor que no lo intente porque no obtendría respuesta por nuestra parte".
"Las instrucciones que tienen las embajadas de la Unión Europea es no hacer ningún acto, comunicación, con las autoridades provisionales y me imagino que por eso ni siquiera lo han intentado", explicó.
El ministro destacó el papel que jugará Insulza en las negociaciones, al que definió como un "gran político de enorme experiencia" que cuenta con "todo el respaldo de la comunidad internacional" y que sabrá cumplir con su cometido, el de "garantizar retorno pacífico, tranquilo, constitucional y legal a través del diálogo y la negociación y no a través de militares o golpes de Estado". "Eso es un capítulo del pasado", subrayó.
Las autoridades provisionales de Honduras, indicó, "deben reflexionar y pensar que la única manera de mantener la convivencia política es a través del diálogo" y si optan por esta vía, señaló, tendrán el apoyo de España y de los países del entorno. Pero lo que no se puede hacer "en ningún caso", advirtió, "es aceptar la violación de la Constitución porque eso no son formas de llevar la democracia y la paz".
Por último, se congratuló de la "muy positiva" respuesta de la Administración de Estados Unidos ante esta situación que, recalcó, "no ha dudado en ningún momento" en reprobar el golpe de Estado y alinearse con el resto de la comunidad internacional.