LA PAZ, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) ha condenado este martes el incidente aéreo sufrido la semana pasada por el presidente de Bolivia, Evo Morales, después de que varios países europeos le denegaran la autorización a sobrevolar sus espacios aéreos, al tiempo que ha formulado un llamamiento "firme" a los gobiernos de Portugal, Francia, Italia y España para que expliquen el incidente.
En su resolución, el organismo ha expresado su solidaridad con el mandatario boliviano y ha condenado las "actuaciones que violan las normas y principios básicos del derecho internacional, como la inviolabilidad de los jefes de Estado".
"Hacer un firme llamado a los gobiernos de Francia, Portugal, Italia y España para que brinden las explicaciones necesarias sobre los hechos ocurridos con Morales, así como las disculpas correspondientes", agrega el texto.
Asimismo, ha hecho un llamamiento "a la continuación del diálogo respetuoso y constructivo entre las partes conforme las normas del Derecho Internacional y los mecanismos de solución pacífica de controversias".
Por último, el organismo regional ha reiterado "la vigencia plena de los principios, normas y costumbres internacionales que regulan las relaciones diplomáticas entre los estados y garantizan la convivencia pacífica entre todos los países que conforman la comunidad internacional".
El texto ha sido aprobado tras ocho horas de debate, si bien Canadá y Estados Unidos se han opuesto al mismo argumentando que el incidente no está claro y que el Gobierno boliviano ha de solucionar el suceso de forma bilateral con los países involucrados.
Horas antes, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, describió como una "grave ofensa que deja una herida" el incidente aéreo.
Insulza destacó que el suceso "no es calificable como un incidente cualquiera" después de escuchar al representante boliviano ante el organismo, así como las explicaciones proporcionadas por España, Italia, Francia y Portugal.
"Es una ofensa grave a un presidente democrático de esta región. Es una ofensa grave haberle impedido el paso, es una ofensa grave haberle obligado a aterrizar de emergencia (en Viena), es una ofensa grave haberle hecho permanecer ahí, y, si efectivamente se le pidió que dijera de nuevo quién iba en el avión, eso es una ofensa grave", resaltó.
En este sentido, destacó que "no puede ser casualidad" que cuatro países impidieran el paso del avión de un jefe de Estado por la sospecha de que en la aeronave viajara el exagente de la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense (NSA) Edward Snowden, acusado por Washington de revelar la existencia de una red de espionaje global conocida como PRISM.
"De pronto, cuatro países cierran su espacio aéreo a un avión. ¿Y esto es casualidad? No, está muy claro que aquí hay un hecho que va más allá de las explicaciones que aquí se han dado, aquí hay un hecho grave que no ha sido aclarado, y eso debe ser condenado o lamentado con energía, no es aceptable", remachó Insulza.