El suministro de agua potable a los desplazados y afectados, primordial
Las ONG expresan su particular preocupación por la situación de los niños tras el desastre
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
Las ONG internacionales con presencia en Guatemala se están movilizando para ofrecer su ayuda a las autoridades del país tras la erupción el domingo del Volcán de Fuego que ha dejado hasta el momento al menos 69 muertos y alrededor de dos millones de afectados, aunque se teme que el balance aumente a medida que avancen las operaciones de rescate.
"Las nubes de ceniza y humo han cubierto cientos de kilómetros afectando a los cultivos, proyectos agrícolas, turismo e incluso vuelos locales e internacionales", ha resaltado Luis Corzo, coordinador local de Emergencias y Respuesta Humanitaria de World Vision Guatemala.
La ONG está haciendo un seguimiento desde el primer momento de "las aldeas afectadas y los programas de desarrollo en los que trabaja en la zona para asegurar el bienestar y la protección de los niños" ya que "la súbita erupción obligó a centenares de familias a huir de sus hogares, y muchos niños y niñas se separaron de sus padres o de sus cuidadores en el proceso".
En este sentido, Corzo ha precisado que World Vision respalda las acciones del Gobierno guatemalteco en su respuesta de emergencia y hará todo lo que esté a su alcance "para aliviar el dolor de aquellos que han perdido sus posesiones, pero especialmente aquellos que han perdido a sus seres queridos".
Por su parte, Oxfam ha indicado en otro comunicado que está evaluando junto a sus organizaciones socias la situación en terreno en estrecha coordinación con el Gobierno guatemalteco a través de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) con el fin de "definir las acciones humanitarias para seguir velando por los derechos de la población más vulnerable, que en cualquier desastre suelen ser mujeres, niñas y niños".
Según ha precisado la ONG (Oxfam Intermón en España), inicialmente concentrará sus esfuerzos en llevar agua a las personas afectadas, ya que en este tipo de emergencias el suministro de agua potable es una necesidad apremiante.
En este sentido, ha puesto a disposición filtros de agua y kits de higiene que incluyen artículos de aseo, los cuales está previsto que se comiencen a distribuir, junto con sus socios locales, a partir de este mismo martes.
Por su parte, Acción contra el Hambre (ACH) ha enviado a la zona, en la que trabaja desde 2016, un equipo de emergencia con el fin de analizar las necesidades más inmediatas y valorar una posible intervención de emergencia focalizada en el sector de agua y saneamiento.
"En el plazo de dos a tres días, el acceso a agua será una importante necesidad humanitaria en la zona afectación severa y sus inmediaciones", ha advertido el director de ACH en Centroamérica, Miguel Ángel García.
PROPORCIONAR AGUA, PRIORITARIO
La ONG considera que prioritario proporcionar agua y un sistema de saneamiento básico entre los más de 3.000 desplazados por la erupción así como proceder a la limpieza de pozos y sistemas de agua y a medio plazo, valorar el impacto del desastre en los medios de vida de la población, así como necesidades de apoyo vía transferencias económicas.
García ha explicado que el país se encuentra en plena temporada de lluvia "lo que puede provocar lahares, flujos de ceniza y agua que se deslizan desde las laderas de los volcanes". Estas riadas podrían desbordarse sobre aldeas y caseríos que aún no han sido afectados en buena parte del departamento de Escuintla, ha precisado la ONG, incidiendo en que las labores de prevención y alerta por parte de las autoridades son fundamentales para evitar mayores daños.
Por su parte, Plan International ya ha comenzado a repartir 500 colchones y 500 kits de sábanas en los refugios donde se encuentran las personas afectadas en coordinación con la ONU, la CONRED y otras ONG.
"Estamos particularmente preocupados por la seguridad y el bienestar de los niños y niñas, los más vulnerables en casos de emergencia", ha reconocido la directora de Incidencia Política de Plan International España, Emilia Sánchez. "Necesitamos una rápida y adecuada movilización de fondos por parte de todas las instituciones públicas y sociales para poder hacer frente a esta situación", ha sostenido.
En estos momentos, las autoridades están evaluando el daño a los servicios básicos en las áreas afectadas, incluidos puentes y carreteras, sistemas de electricidad y agua, y evaluando las necesidades para restablecer los servicios y el acceso a las personas afectadas.
Desde Plan International han advertido de que es imprescindible seguir trabajando para prevenir nuevos desastres y reducir los existentes aumentando la preparación para la respuesta, recuperación y el refuerzo de la resiliencia.
"El trabajo de reconstrucción a partir de ahora es enorme, sobre todo si tenemos en cuenta que ya hay casi dos millones de personas afectadas y que Guatemala es uno de los países con tasas de desigualdad más altas de Latinoamérica y el Caribe", ha explicado por su parte la coordinadora de programas de emergencia de la ONU para América Latina, Elisa Paz.
"Lo principal en esta fase de la emergencia es atender las necesidades básicas de las personas más afectadas, incluyendo refugio y asistencia psicológica", ha añadido. Plan International ha precisado que ningún miembro de la organización, ni sus familias, ni las familias de los niños y niñas apadrinados se han visto afectados por la erupción, ya que no viven en esa zona concreta.