MADRID, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
Una investigación de Naciones Unidas ha atribuido a las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), un grupo rebelde de origen ugandés, la responsabilidad de tres ataques perpetrados contra 'cascos azules' en República Democrática del Congo (RDC), entre ellos uno cometido en diciembre y en el que murieron 15 militares tanzanos y cinco congoleños.
Tanto el ataque de diciembre como otros dos anteriores registrados en septiembre y en octubre de 2017 en la región de Kivu Norte "se llevaron a cabo usando el mismo 'modus operandi' y todas las pruebas disponibles señalan a las ADF", ha concluido la comisión responsable de analizar estos casos, según un comunicado de Naciones Unidas.
El secretario general de la ONU, António Guterres, anunció a principios de enero estas pesquisas, lideradas por el ruso Dimitri Titov, para "establecer las circunstancias que llevaron a estos ataques, evaluar la respuesta de la(misión de paz) MONUSCO y determinar las acciones necesarias para impedir que ocurran de nuevo".
Así, los expertos han detectado algunas lagunas en la formación y el posicionamiento de la MONUSCO y de su fuerza de intervención que se tradujeron, por ejemplo, en la falta de un plan viable para ayudar a los 'cascos azules' que estaban siendo atacadas. Piden acometer de forma "urgente" mejoras en materia de mando y en el refuerzo de equipos.
"Al margen de las operaciones militares, el equipo de investigación también ha subrayado la importancia de un compromiso reforzado con los actores políticos de la región y las partes interesadas para entender mejor y combatir la amenaza que representan las ADF", ha informado la ONU.
La milicia actúa en la RDC desde la década de los noventa y, a pesar de las reiteradas ofensivas lanzadas contra ella, sigue generando violencia en la zona. Está considerado uno de los grupos armados más peligrosos de las varias decenas que operan en el país africano.