NUEVA YORK, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
La representante especial de la Secretaría General de Naciones Unidas para la Violencia Sexual en los Conflictos, Margot Wallström, ha instado al Gobierno de Costa de Marfil a garantizar que este tipo de violencia no se usará para intimidar a la población de cara a las elecciones legislativas del 11 de diciembre.
A través de un comunicado, Wallström ha instado al Gobierno a "materializar su compromiso con la lucha contra la impunidad de los crímenes sexuales en acciones concretas". "A la luz de las próximas elecciones, hago un llamamiento para poner en marcha medidas para evitar que la violencia sexual sea empleada como un arma de intimidación", ha dicho.
Si bien, la representante de la Secretaría General no ha limitado su llamamiento al Gobierno, sino que lo ha extendido a "todos aquellos que ostenten una posición de influencia sobre la sociedad marfileña", según informa el Centro de Noticias de Naciones Unidas.
Wallström ha apuntado que "todavía queda mucho por hacer en la asistencia a las víctimas de la violencia sexual en Costa de Marfil". En concreto, ha señalado la necesidad de garantizar su acceso a la justicia y su reinserción en la sociedad.
Además, ha recordado que la violencia sexual fue usada como arma de intimidación en las elecciones presidenciales de hace un año, en las que se enfrentaron los entonces presidente y líder opositor, Laurent Gbagbo y Alassane Ouattara, respectivamente.
También se recurrió a ella durante la ola de violencia postelectoral a la que dio lugar la publicación de los resultados. Partidarios de Gbagbo y Ouattara se enfrentaron durante cinco meses en Abiyán, hasta que el entonces presidente fue detenido y obligado a ceder el poder a su rival, reconocido como legítimo vencedor por la comunidad internacional.
El Gobierno de Ouattara se ha marcado como objetivo conseguir la reconciliación nacional. El presidente tendrá la oportunidad de comprobar si lo ha conseguido en las elecciones del próximo día 11, las primeras que se celebran tras la salida de Gbagbo del poder.
(EUROPA PRESS INTERNACIONAL)