La organización insta al Estado hebreo a investigar este "ataque desproporcionado", que es "injustificable"
MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
La organización internacional Human Rights Watch (HRW) ha afirmado este viernes que Israel incumplió las leyes de la guerra al llevar a cabo el ataque aéreo que causó la muerte de doce civiles en la Franja de Gaza el pasado 18 de noviembre.
Ese día, la aviación militar israelí lanzó una bomba sobre la vivienda de la familia Al Dalu, situada en la ciudad de Gaza. Murieron diez miembros de la familia --un hombre, cinco mujeres y cuatro niños--, así como un joven y una mujer mayor de la familia Al Muzannar, que vivía junto a ellos, según ha precisado la organización en un comunicado.
Las Fuerzas Armadas israelíes dijeron en un primer momento que su objetivo era un combatiente de Hamás llamado Yahia Abayah, y ocho días después informaron de que el objetivo era Mohamed Jamal al Dalu, una de las víctimas mortales del ataque, en el que también resultaron heridos al menos doce civiles.
Aseguraron que Al Dalu, un policía de bajo rango, era un "terorista" miembro de Hamás. Sin embargo, HRW ha indicado que, incluso si ese hombre fuera un objetivo militar legítimo, el ataque fue "ilegalmente desproporcionado" porque era probable que muriesen "una gran cantidad de civiles".
Según las leyes de la guerra, el beneficio militar que se espera obtener con un ataque debe ser superior a los daños que ese ataque podría causar a la población civil.
HRW ha destacado que el Estado hebreo tiene la "obligación" de investigar cualquier ataque desproporcionado, indemnizar a las víctimas y procesar por "crímenes de guerra" a quienes hayan cometido "deliberadamente o por imprudencia" una violación grave de las leyes de la guerra.
"INTENTO DE JUSTIFICAR LO INJUSTIFICABLE"
Fred Abrahams, asesor especial en HRW, ha concluido tras una investigación que "los hechos no sustentan la afirmación de Israel de que el ataque contra el domicilio de los Al Dalu estaba justificado". "Es Israel quien debe explicar por qué bombardeo una vivienda llena de civiles y mató a doce personas", ha añadido.
El Derecho Internacional Humanitario y las leyes de la guerra, que son aplicables en los enfrentamientos que mantuvieron en noviembre el Ejército israelí y milicianos palestinos, estipulan que no se puede atacar a civiles. En esta categoría se incluyen los policías, a no ser que formen parte de las fuerzas de una de las partes en conflicto o participen directamente en las hostilidades.
HRW ha señalado que Israel "no ha proporcionado ninguna información que respalde la afirmación de que Mohamed al Dalu estaba participando de forma directa en las hostilidades".
Abrahams ha criticado el "tardío intento" de Israel de, "una vez que pudo revisar la lista de víctimas, defender el ataque mencionando el nombre de un policía civil que estaba entre los fallecidos". Esto parece indicar que el Estado hebreo hizo "un intento de justificar lo injustificable", ha agregado.
AL DALU NO ERA MIEMBRO DE UN GRUPO ARMADO
El 27 de noviembre, cinco días después de que se encontrara el cadáver de Mohamed al Dalu, la teniente coronel Avital Liebovitch, portavoz del Ejército israelí, aseguró que era "un terrorista miembro del brazo armado de Hamás", sin explicar en qué se basaba para afirmarlo.
No obstante, miembros de la familia Al Dalu y vecinos han dicho que Mohamed no formaba parte de ningún grupo armado palestino, sino que trabajaba como policía civil para el Ministerio del Interior del Gobierno de Gaza; concretamente, protegiendo a personalidades importantes.
El superior de Mohamed al Dalu en la Policía, Refaat al Wali, quien dirige la Fuerza de Seguridad y Protección en el Ministerio, declaró a HRW que durante los últimos enfrentamientos trabajó todos los días y que no estaba integrado en ningún grupo armado.
Un portavoz de la Policía, Ayman al Batnigri, confirmó que el fallecido era miembro de la Fuerza de Seguridad y Protección y aclaró que se trata de "un departamento civil".
En el Ministerio del Interior, HRW vio un póster en el que aparecían 25 policías que murieron durante el último conflicto armado y entre ellos estaba Mohamed al Dalu.
Ocho de ellos figuraban también en la lista de los milicianos de las Brigadas al Qassam (el brazo armado de Hamás) que fallecieron, pero no Al Dalu, y ninguno de los 25 policías estaba en las listas de Yihad Islámica y de los Comités de Resistencia Popular.
En los últimos enfrentamientos entre las fuerzas israelíes y las milicias palestinas en la Franja de Gaza, ocurridos entre el 14 y el 21 de noviembre, ambas partes perpetraron "ataques ilegales contra civiles", según HRW. Murieron al menos 103 civiles palestinos y cuatro civiles israelíes.