MADRID 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Ejército de Pakistán ha dado por finalizada su ofensiva contra los milicianos de la región tribal de Orakzai. El general de brigada Pervez, al mando de la operación, precisó el martes en una rueda de prensa que el 90 por ciento del área está despejada de insurgentes. La incursión militar se ha prolongado durante cinco meses y medio.
Con motivo del Eid al Fitr, la fiesta con la que se da fin al mes de Ramadán, hasta 11.000 familias de un total de 30.000 desplazadas están volviendo a sus hogares en Orakzai.
La zona era un bastión de los rebeldes y terroristas que operan en Waziristán Sur y Norte, Jiber, Peshawar y otras áreas conflictivas del país, prosiguió Pervez, citado por el rotativo paquistaní 'Dawn'.
El general precisó que los soldados han destruido todos los escondites de los milicianos. Las fuerzas de seguridad también se han incautado de una gran cantidad de armas y municiones, explosivos y chaquetas para perpetrar atentados suicidas.
Durante la operación han muerto 60 soldados, mientras que del lado insurgente se estima que las bajas han sido unas 600. El número de detenidos asciende a 250.
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