RANGÚN, 9 Nov. (Reuters/EP) -
El gobernante Partido por la Unión, la Solidaridad y el Desarrollo (PUSD) ha admitido su derrota en las elecciones parlamentarias celebradas el domingo en Birmania, en las que la Liga Nacional para la Democracia (LND), liderada por la premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, se habría hecho con el 80 por ciento de los votos.
"Hemos perdido", ha admitido el líder en funciones del PUSD, Htay Oo, en una entrevista a la agencia Reuters. Aunque aún no se han difundido "resultados finales", Htay Oo ya ha avanzado que los aceptarán "sin ninguna reserva" y que se centrarán en averiguar las "razones" de la derrota.
El dirigente del PUSD se ha mostrado especialmente sorprendido por los malos resultados obtenidos en la circunscripción de Hinthada, considerada hasta ahora un reflejo del amplio apoyo de la formación gobernante en las zonas rurales.
"No lo esperaba porque hemos hecho mucho por esta región", ha lamentado Htay Oo. "En cualquier caso, es la decisión del pueblo", ha apostillado.
CELEBRACIÓN DE LA LND
Una sonriente Suu Kyi se ha dirigido a los simpatizantes de su partido desde el balcón de las oficinas de la LND en Rangún y, en un breve discurso, ha instado a tener paciencia y a esperar los resultados oficiales.
Sin embargo, un portavoz de la LND, Win Htein, ha dado por hecha ya la victoria de su partido. La formación de Suu Kyi prevé haber obtenido más del 80 por ciento de los votos en siete áreas centrales, mientras que en regiones como Mon y Kayin el apoyo superó el 65 por ciento.
En escaños, este masivo nivel de apoyo podría traducirse en una representación parlamentaria superior al 70 por ciento --más del 90 por ciento en las circunscripciones del centro--, según las previsiones del portavoz.
Por lo pronto, la Comisión Electoral ha otorgado a la oposición los primeros doce escaños que han sido confirmados oficialmente, correspondientes a la ciudad de Rangún. A lo largo de este lunes se irán conociendo datos, aunque aún habrá que esperar al menos hasta el martes para obtener una imagen más nítida de esta histórica cita.
Unos 30 millones de personas participaron en los comicios. Las Fuerzas Armadas, símbolo del poder en la Birmania de las últimas décadas, también ha dicho que respetará los resultados de unas elecciones inéditas desde hace un cuarto de siglo.