¿Cómo han pasado sus vacaciones los líderes políticos del mundo?

MADRID, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -

OBAMA

El hombre más poderoso del mundo ha pasado unos días de intranquilas
vacaciones en Martha's Vineyard, una isla exclusiva perteneciente al
estado de Massachusetts.

Destino habitual para las vacaciones de los presidentes de EEUU (Bill
Clinton era asiduo), Barack Obama ha pasado en la isla del 10 al 18 de
agosto acompañado por su mujer Michelle y sus dos hijas.

Sin embargo, sus vacaciones no han resultado todo lo relajantes que
hubiera deseado. Las crisis en Irak, en Ucrania y en Ferguson (por el
caso del ciudadano negro Michael Brown tiroteado por la policía) han
perturbado su descanso.

De hecho, ha sido blanco de críticas por salir a jugar al golf
sonriente pocas horas después de comparecer "desolado"
por la decapitación del periodista James Foley a manos de los
terroristas de Estado Islámico.

MERKEL

La mujer más poderosa del mundo también ha sido fiel a sus costumbres
veraniegas. Junto con su marido, el discreto Joachim Sauer, asistió al
Festival Richard Wagner en Bayreuth.

Para sus tres semanas de descanso, la canciller y su marido han
elegido de nuevo refugiarse en los Alpes italianos, en concreto en la
provincia autónoma de Bolzano, cerca de la frontera con Alemania.

Allí ha podido disfrutar de una de sus aficiones preferidas, el
senderismo. Y esta vez ha logrado mantenerse alejada de los objetivos
de los paparazzis, que el verano pasado le sacaron varias fotos en
traje de baño en la isla de Ischia.

CAMERON

El primer ministro británico es un gran amante de España. Al menos,
como destino vacacional, ya que en Semana Santa ha viajado en los dos
últimos años a Lanzarote, y también ha visitado siendo presidente
Granada, Ronda o Ibiza.

Sin embargo, este verano ha pasado la primera parte de sus vacaciones
en la vecina Portugal, en Cascais, periodo que acortó para volver a Londres tras
conocerse que el asesino de James Foley es británico. Después pasó unos días en Cornualles, en el suroeste de Gran Bretaña.

RAJOY

El presidente del Gobierno español también se mantuvo fiel a sus
tradiciones y eligió el municipio pontevedrés de Ribamudia para pasar
unos días descanso con su familia.

Había pasado unos días en el Parque Nacional de Doñana, en una finca
propiedad del Estado, antes de viajar a Mallorca para despachar en
Marivent con el rey Felipe VI.

En Galicia, además de repetir este verano caminata con José Benito
Suárez, el marido de Ana Pastor, recorrió seis kilómetros del Camino
de Santiago con la canciller Angela Merkel. Rajoy estrenó el curso
político en el castillo de Sotomayor por noveno año consecutivo.

HOLLANDE

El presidente de la República francesa sólo concedió dos semanas de
vacaciones a los ministros, lo cual no sentó demasiado bien entre
estos, según informó Le Figaro.

El presidente socialista, que acaba de afrontar su segunda crisis de
gobierno de la legislatura, ha elegido para sus días de asueto la
mansión oficial de La Lanterne, en Versalles, no lejos de El Elíseo.

Por segundo verano consecutivo el jefe del Estado del Vaticano ha
optado por no cambiar de residencia: se ha limitado a reducir su
actividad. Es tradición que los Papas descansen en la residencia de
Castel Gandolfo, pero él ha continuado en la casa de Santa Marta.

El jesuita argentino se mantiene, así, fiel a sus costumbres. Cuando
aún no era el Papa Francisco, sino el obispo de Buenos Aires Jorge
Mario Bergoglio, tampoco salía de la ciudad durante el verano.

RENZI

El primer ministro italiano ha pasado sus primeras vacaciones
presidenciales en Forte dei Marmi, una localidad balnearia de la
provincia de Lucca, región de la Toscana.

Durante su semana de descanso ha podido disfrutar de dos de sus deportes
preferidos: el tenis y la bicicleta.

PUTIN

El mandatario ruso esta vez se ha quedado en Moscú. Desde la capital
ha manejado los hilos de los intereses de su país en el conflicto con
Ucrania. A principios de agosto decidió el veto ruso a los productos
agroalimentarios europeos.

En veranos anteriores el ex agente del KGB solía viajar a Siberia o a
regiones del Lejano Oriente, desde donde se dejaba ver en fotos
caracterizado como cazador, ballenero, explorador o en otras facetas de
sus aficiones en la naturaleza.