ESTAMBUL, 1 Oct. (Reuters/EP) -
El Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) ha asegurado este martes que el paquete legislativo de medidas de "democratización" presentado la víspera por el Gobierno no tiene como objetivo poner fin al conflicto que mantienen sus milicianos con las fuerzas gubernamentales.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció este lunes un paquete de medidas destinadas a promover la integración de los kurdos y aumentar los derechos de las minorías, como permitir el uso de otras lenguas, ampliar el límite mínimo de votos para entrar en el Parlamento, unas iniciativas con las que pretende convencer al PKK de que retome el proceso de paz.
Catalogado como organización terrorista por la Unión Europea, Estados Unidos y Turquía, el PKK ha asegurado que las reformas anunciadas por el 'premier' carecen de "mentalidad y capacidad" para lograr "una solución" al conflicto.
Erdogan presentó el lunes el esperado paquete de "democratización" del país que, entre otras propuestas, incluye la supresión de la prohibición de usar el pañuelo islámico en edificios públicos, permitir hacer campaña a los partidos en otras lenguas que no sean el turco o modificar el porcentaje mínimo de votos para entrar en el Parlamento.
"Este paquete no será la primera ni la última de tales reformas", aseguró Erdogan en rueda de prensa en Ankara. "No es racional esperar que este paquete aborde todos los problemas del país, aunque deseamos poder hacerlo", subrayó el primer ministro.
Erdogan destacó los "problemas" que abordan sus propuestas "han estado presentes en toda la era republicana del país" e incidió en que "este paquete no es resultado de una negociación, sino de las demandas del pueblo".