NUEVA YORK, 15 Nov. (Reuters/EP) -
El Frente Polisario ha solicitado este lunes al Consejo de Seguridad de la ONU que lleve a cabo una investigación sobre el asalto al campamento de protesta saharaui próximo a El Aaiún la semana pasada y que se fije una fecha tope para la resolución del contencioso del Sáhara Occidental. El máximo órgano de Naciones Unidas se reúne mañana para abordar el caso de la antigua colonia española.
El embajador del Polisario ante la ONU, Ahmed Bujari, ha enviado una carta al embajador británico, Mark Lyall Grant, cuyo país ejerce este mes la presidencia del Consejo de Seguridad, en la que le pide que encabece una misión del Consejo para "establecer un relato con autoridad de los acontecimientos de la semana pasada".
Según Bujari, en el asalto contra el campamento de protesta saharaui instalado en las proximidades de El Aaiún fallecieron 36 saharauis, mientras que otros 163 resultaron heridos. De acuerdo con la versión ofrecida por las autoridades marroquíes, en el asalto no murió ningún saharaui, pero sí nueve agentes, mientras que otro más falleció en los disturbios que se produjeron a continuación en la ciudad, al igual que un saharaui.
Bujari reclama que la misión determine si el asalto para desmantelar el campamento, cuyo objetivo era denunciar la situación económica y social en que viven los saharauis, supuso una violación del acuerdo de alto el fuego firmado en 1991 entre Marruecos y el Polisario.
Asimismo, el Polisario considera que el Consejo de Seguridad debería pedir a Marruecos que permita que la misión de la ONU en el Sáhara, la MINURSO, tenga acceso sin restricciones y cumpla con su demanda de que los 215 efectivos que la componen tenga mandato para supervisar el respeto de los Derechos Humanos.
Por otra parte, la carta expresa la frustración con el lento avance de las conversaciones de paz. Desde 2007 se han mantenido siete rondas --la última de ellas la semana pasada coincidiendo con los sucesos de El Aaiún-- sin que las partes hayan llegado a ningún acuerdo.
CRÍTICAS AL PROCESO DE DIÁLOGO
"Actualmente, el proceso de la ONU es simplemente un camuflaje para una ocupación sin fin", lamenta Bujari, para quien "la situación es una desgracia internacional". Aunque el enviado especial de la ONU para el Sáhara Occidental, Christopher Ross, dijo la semana pasada que las partes habían acordado dos nuevas reuniones --en diciembre y enero--, el embajador del Polisario ha afirmado que "hemos llegado a una bifurcación en el camino".
Por otra parte, la misiva pide al Consejo de Seguridad que fije una fecha tope para resolver la disputa y advierte de que si no hay progresos a corto plazo, el Polisario "se verá obligado a reconsiderar su posición en lo relativo a todo el proceso".
Si la ONU no puede proteger a los saharauis, "nos veremos obligados a hacerlo nosotros mismos", señala Bujari, dando a entender, como han hecho en otras ocasiones los dirigentes saharauis, que el Polisario podría retomar la lucha armada.