También exigirá pagos directos a empresas europeas, entre ellas españolas, que importan arena del Sáhara para Canarias
BRUSELAS, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Frente Polisario reclamará 240 millones de euros anuales en concepto de compensación por "daños e intereses" por las exportaciones de productos del Sahara Occidental a la Unión Europea sin su consentimiento y también ha avanzado que se querellará contra empresas europeas concretas para reclamarles pagos directos si no regulan su situación con el representante "legítimo" del pueblo saharaui.
"Haremos un recurso en responsabilidad por el daño provocado contra la Unión Europea. Tenemos cifras precisas (...) Hay una cifra de volumen de negocios de 240 millones por año sobre las exportaciones del Sáhara Occidental", ha explicado el abogado del Frente Polisario, Gilles Devers, en una entrevista con Europa Press.
"Vamos a reclamar esto", ha explicado el letrado, que ha asegurado que son "muy generosos" al no reclamar compensaciones por las exportaciones de productos del territorio saharaui anteriores al 21 de diciembre de 2016, cuando el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó que el acuerdo agrícola entre la UE y Marruecos no es aplicable al Sáhara Pccidental y que el pueblo saharaui debe dar su consentimiento a la explotación de sus recursos naturales.
El representante del Frente Polisario en Europa, Mohamed Sidati, ha confirmado durante la entrevista que esta cifra "puede constituir reparación y perjuicio" aunque el daño provocado "es mucho más". "Son ya casi 40 años de ocupación", ha esgrimido, al tiempo que ha recordado que tampoco hay que excluir "los daños ecológicos" por "la destrucción de varios lugares de biodiversidad" por la explotación de los recursos pesqueros en aguas saharauis por parte de la flota europea.
Sidati ha asegurado que "los saharauis no representan ninguna amenaza para los intereses de los pescadores" europeos pero éstos deben reclamar el consentimiento del Frente Polisario para explotar los recursos del Sáhara occidental.
LA JUSTICIA EUROPEA SE PRONUNCIARÁ SOBRE ACUERDO PESQUERO EL 27 DE FEBRERO
"Los pescadores españoles pueden faenar en aguas del Sáhara occidental con la única condición de que no sea a través del acuerdo que autoriza la ocupación", ha avisado, en referencia al acuerdo pesquero entre la UE y Marruecos, sobre cuya validez se pronunciará el Tribunal de Justicia de la UE el próximo 27 de febrero.
"La Unión Europea pesca el 90% en aguas del Sáhara occidental. Paga cada año 14 millones al Reino de Marruecos. El acuerdo lleva 12 años. Haga el cálculo de las indemnizaciones que podría pedir el Frente Polisario en nombre del pueblo del Sáhara occidental", ha agregado Manuel Devers, otro letrado del equipo del Frente Polisario, que ha asegurado que hay "un 70% de probabilidades" de que el Tribunal de Justicia de la UE "confirme la conclusión de (el abogado general del TUE, Melchior) Wathelet".
En este sentido, ha insistido en que hay base para reclamar "responsabilidad penal a los miembros de la Comisión, del Consejo" por "malversación de fondos públicos" a "una cuenta del tesoro público de Marruecos".
El abogado general del TUE dictaminó el pasado 10 de enero que el acuerdo pesquero "no era válido" por aplicarse al Sáhara Occidental y a las aguas adyacentes y que el bloque comunitario "incumplió su obligación de respetar el derecho del pueblo del Sáhara Occidental a la libre determinación", dado que el pueblo saharaui "no ha dispuesto libremente de sus recursos naturales".
El letrado Gilles Devers ha explicado que se darán "el tiempo mínimo para analizar la sentencia" del 27 de febrero del Tribunal de Justicia de la UE y si "no hay un cambio sobre el consentimiento" que la UE y los Estados miembros deberán pedir al Frente Polisario como "único" representante legítimo del pueblo saharaui emprenderán rápidamente acciones.
ACCIONES CONTRA EMPRESAS, INCLUIDO ESPAÑOLAS
"Nos querellaremos contra empresas agrícolas, de pesca, aviación en las jurisdicciones nacionales", ha explicado el letrado, que también ha avanzado que emprenderán "un procedimiento urgente para bloquear el pago de derechos de pesca".
"En agricultura, vamos a comenzar en los próximos días contra IDYL", ha avanzado el letrado, en referencia a la sociedad francesa que importa tomates del Sáhara.
"También iniciaremos procedimientos en España contra empresas que exporta arena", ha explicado, sin querer dar más detalles de las empresas, aunque Sidati ha explicado que se trata de empresas españoles que llevan arena a "la playa de Canarias".
El letrado sí ha explicado que harán "un procedimiento que se llama pago directo" para reclamar ante los tribunales nacionales el pago directo "para el pueblo saharaui" una vez realizadas las entregas de arena. "Esto es muy eficaz. Creen que son procedimientos complicados. No, dejamos hacer la operación, la arena se suministra, al día siguiente vamos al tribunal y al día siguiente el dinero nos llega", ha explicado el letrado, que ha admitido que "incautar los barcos y pedir interdicciones es bastante difícil".
También iniciarán acciones contra "las compañías de seguros" que garantizan las exportaciones. "Iniciaremos muy rápidamente un primer proceso también", ha explicado Gilles Devers.
Sidati ha alertado del "juego pernicioso" de intentar "descartar al Frente Polisario" como representante legítimo del pueblo saharaui a efectos de obtener el consentimiento del pueblo saharaui sobre la explotación de sus recursos y ha rechazado "crear entidades presentadas por Marruecos".
"La UE debe asumir sus responsabilidades. Países como España y Francia que manipulan esta situación están vulnerando cada día más el proceso de paz y la perspectiva de conseguir una solución pacífica" en el Sáhara occidental, ha avisado el representante del Frente Polisario en Europa, que ha subrayado que "el Frente Polisario es parte de la estabilidad en la región" y sin una solución la situación pueden convertirse en "muy, muy peligrosa".
Con todo, Sidati ha admitido "esperanza" y "optimismo" no sólo por las conclusiones del abogado general del TUE sino también por el hecho de que en los últimos días "muchas multinacionales están retirándose del Sáhara" por la "conciencia" sobre la explotación de sus recursos, entre ellas una sociedad canadiense que explota fosfatos, la empresa británico-suiza de minería Glencore, mientras que Enel también "suspendió" sus actividades y el Gobierno alemán ha dicho que no va a garantizar "las inversiones que hace Siemens en el Sáhara".
"Vamos a ir hasta el final con la justicia (...) Pero sobre todo no vamos a dejar ninguna puerta sin tocar para no dejar la posibilidad de seguir explotando nuestros recursos", ha concluido.