MADRID 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, ha aplaudido este jueves a la decisión de los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintiocho de suspender la cooperación económica y financiera con Rusia, incluyendo los préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI), como represalia por seguir desestabilizando el este de Ucrania.
"El Consejo Europeo ha dado un paso importante en apoyo de la soberanía, la integridad territorial y la independencia de Ucrania. Nuestros diálogos han dado resultado", ha dicho Poroshenko a través de su página en la red social Facebook, según ha informado la agencia rusa de noticias RIA Novosti.
Los líderes europeos han anunciado además que antes de que acabe julio ampliarán la lista de sanciones para añadir, por primera vez, a empresas rusas que colaboren en el conflicto en Ucrania. No obstante, las conclusiones aprobadas en el Consejo Europeo no mencionan ninguna empresa.
"El Consejo Europeo pide al BEI que suspenda la firma de nuevas operaciones de financiación en la Federación Rusa", anuncian las conclusiones. Además, los Estados miembros "coordinarán sus posiciones en el consejo de administración del Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo con el objetivo de suspender también la financiación de nuevas operaciones".
La UE "expandirá las medidas restrictivas con el objetivo de apuntar a entidades, también de la Federación Rusa, que están respaldando materialmente o financieramente acciones que socaven o amenacen la soberanía de Ucrania, su integridad territorial y su independencia. Para ello, los líderes europeos encargan a sus ministros de Exteriores "que adopten los instrumentos jurídicos necesarios y que decidan para finales de julio sobre una primera lista de entidades y personas".
Finalmente, la Comisión deberá examinar, caso por caso, si suspende la aplicación de los programas de cooperación bilateral y regional de la UE con Rusia, con la excepción de los que afecten a la sociedad civil.
Los líderes europeos reiteran su amenaza de pasar a la tercera fase de sanciones en cualquier momento si es necesario y vuelven a exigir a Rusia que "utilice activamente su influencia sobre los grupos armados ilegalmente" en el este de Ucrania y que "detenga el flujo de armas y militantes a través de la frontera".
Los jefes de Estado y de Gobierno han puesto fin además a la suspensión, acordada el pasado mes de febrero durante las protestas en Kiev, de las licencias para exportar a Ucrania equipos que puedan ser utilizados para la represión interna.
Hasta ahora, la UE ya ha sancionado a 72 dirigentes ucranianos y rusos y a 2 entidades basadas en Crimea por desestabilizar Ucrania.