LIBERIA 14 Sep. (Reuters/EP) -
La presidenta de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf, ha solicitado al presidente estadounidense, Barack Obama, el envío de ayuda urgente para combatir el brote de ébola en el país, asegurando que sin su respaldo su Gobierno no podrá hacer frente al virus.
Liberia es uno de los países más afectados por el ébola, que desde el pasado mes de marzo ha causado la muerte de más de 2.400 personas y ha colapsado los sistemas sanitarios.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha resaltado el peligro de la extensión del brote en Liberia, donde se han registrado más de la mitad de los fallecimientos y se teme que miles de personas puedan infectarse en las próximas semanas.
En la misma línea se ha manifestado Médicos Sin Fronteras (MSF), que ha establecido numerosos centros de atención en los países más afectados aunque ha advertido de que no tiene capacidad para hacer frente a todos los casos.
Ante esta situación, Johnson Sirleaf ha solicitado mediante una misiva --a la que ha tenido acceso Reuters-- ayuda a Obama, instándole a construir y dirigir al menos una unidad de tratamiento de ébola en Monrovia.
La mandataria ha indicado que los equipos militares y civiles estadounidenses están más preparados y tienen más experiencia en el tratamiento de este tipo de crisis.
"Sin una ayuda más directa de tu Gobiermo, perderemos la batalla contra el ébola", ha asegurado Johnson Sirleaf, que ganó un premio Nobel de la Paz por su trabajo en defensa de los Derechos Humanos de las mujeres.
La presidenta ha asegurado que los centros de tratamiento del virus del país están completos y que las autoridades sanitarias se están viendo obligadas a enviar a gente a sus casas, con el riesgo de contagio que esto conlleva.
"Estoy siendo sincera contigo cuando digo que a este ritmo, nunca conseguiremos romper la cadena de transmisión y que el virus nos sobrepasará", ha escrito la mandataria en su carta al presidente estadounidense.
"Sólo los gobiernos como el tuyo tienen los recursos e instrumentos para desplegarlos en el tiempo necesario para evitar la propagación", ha subrayado Johnson Sirleaf.