LONDRES, 8 Jul. (Reuters/EP) -
El nuevo primer ministro de Etiopía, Abiy Ahmed, y el presidente de Eritrea, Isaías Afewerki, se han fundido en un abrazo tras la llegada del primero a Asmara, la capital eritrea, en el inicio de una histórica visita de paz.
La guerra de 1998-2000 que libraron ambos países mató a unas 80,000 personas y desplazó a cientos de miles de personas de ambos lados. Cientos de miles de soldados y milicias se han enfrentado entre sí a lo largo de los mil kilómetros militarizados de frontera común en las últimas dos décadas. Es uno de los conflictos más longevos de la historia reciente de África.
Ahmed ha decidido poner fin al enfrentamiento, tras anunciar su aceptación incondicional del acuerdo de paz de Argel, en el año 2000, y de la decisión de la Comisión Fronteriza Etiopía-Eritrea (EEBC) que otorgó a Eritrea la pequeña ciudad, Badme, un punto álgido del conflicto.
El pasado 26 de junio, Ahmed recibió en Etiopía a una delegación eritrea encabezada por el ministro de Exteriores del país, Osman Salé, como visita preparatoria a este encuentro.
Antes de la llegada de Ahmed, el ministro de Información de Eritrea, Yemane Gebrmeskel, ha publicado en Twitter que "esta histórica visita, y la cumbre que la va a continuar, es la primera de este tipo en 20 años, y abandera una nueva era de paz y de cooperación".