Los refugiados de Sabra y Shatila reciben con alegría y desconsuelo la muerte del "carnicero" Sharon

Actualizado: domingo, 12 enero 2014 8:06

MADRID 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

Los refugiados palestinos de los campos libaneses de Sabra y Shatila han recibido con alegría y desconsuelo este sábado el fallecimiento del exprimer ministro israelí Ariel Sharon, al que apodan "el carnicero", por su papel en la masacre perpetrada en septiembre de 1982 por milicias cristianas en estos campamentos durante la Guerra de Líbano (1975-1990).

"Es un carnicero, un asesino, un matón", declara Walid, un palestino que reside en la localidad de Shatila. Para Walid, la masacre de Sabra y Shatila "será por siempre una herida en sus corazones", según ha declarado al periódico libanés 'The Daily Star', de la que él fue testigo posterior.

"Todo el pueblo palestino está contento de que esté muerto", apostilla, haciéndose eco de un resentimiento que aún permanece en la memoria de la mayoría de los palestinos y libaneses en estos campos de refugiados, localizados en Beirut oeste, en los que entre 800 y 3.500 palestinos perdieron la vida.

Sharon fue apodado "el carnicero de Beirut" después de que la Comisión Kahan, designada por Naciones Unidas, concluyera que la matanza de refugiados palestinos en dichos campamentos fueron responsabilidad personal suya "por ignorar el peligro de masacre y venganza" por la masacre de Damour.

Cientos de cristianos murieron a manos de combatientes de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en enero de 1976, en el marco de la guerra civil libanesa (1975-1990).

"¿Debería estar contenta? ¿Su muerte acaso va a traerme de vuelta a mis niños?", afirma Milana al Burji, una anciana de 70 años de nacionalidad libanesa que perdió a su marido y sus tres hijos, todos ellos fusilados en un pelotón.

"Fui la primera en entrar (al campamento) cuando todo terminó. Pasé de largo de los cuerpos sin vida para llegar a los de mis niños y mi marido", agrega. "Los milicianos asumieron que todos, en el campo, eran palestinos", lamenta. Milana asevera que "la muerte de Sharon no le traerá la paz" puesto que "nunca le olvidará" por lo que hizo.