SEÚL 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El régimen norcoreano ejecutó públicamente a unas 80 personas en siete ciudades del país el pasado 3 de noviembre, según ha informado en su edición digital el diario surcoreano 'Joong Ang Ilbo', que ha asegurado que se trata de la mayor ejecución en masa realizada por el Gobierno de Pyongyang desde que el joven Kim Jong Un asumió las riendas del país.
El diario surcoreano, que basa su información en una fuente próxima a la política interna norcoreana que ha visitado recientemente el país, ha indicado que las personas ejecutadas habían sido condenadas por "transgresiones" como ver películas surcoreanas y distribución de pornografía.
El día en que se materializó la pena capital, el domingo 3 de noviembre, fueron ejecutadas una media de diez personas en ciudades como Wonsan, situada en la provincia de Kangwon, Chongjin (Norte de Hamgyong), Sariwon (Norte de Hwanghae) y en Pyongsong (Sur de Pyongang). En la capital, Pyongyang, no se realizaron penas capitales.
En Wonsan, las autoridades ataron a varios postes a ocho personas en un estadio deportivo, les cubrieron con sacos las cabezas y les ametrallaron, según la fuente consultada por el diario surcoreano.
Según testigos que presenciaron las ejecuciones, las autoridades de Wonsan reunieron a unas 10.000 en el estadio de Shinpoong, incluidos niños, y les obligaron a presenciar las ejecuciones.
"Escuché a los residentes decir que vieron aterrorizados cómo los cuerpos eran acribillados con fuego de ametralladoras de tal modo que luego era muy difícil reconocer a las víctimas", ha asegurado la fuente que ha viajado recientemente a Corea del Norte.
Las víctimas de Wonsan estaban en su mayoría acusadas por haber visto o traficado con vídeos surcoreanos o por haber estado en posesión de la Biblia o involucrados en prostitución. Los cómplices y los familiares de los ejecutados han sido enviados a prisión.
La razón de las ejecuciones no ha quedado clara por el momento. El diario surcoreano ha apuntado que las ciudades en las que se han registrado están en plena fase de crecimiento económico. Wonsan es una ciudad portuaria que el líder norcoreano, Kim Jong Un, quiere transformar en un destino turístico con infraestructuras como hoteles, un aeropuerto, una estación de esquí en Monte Masik.
El periódico 'Joon Ang Ilbo' ha considerado que la iniciativa de llevar a cabo las ejecuciones en siete ciudades podría ser una medida extrema adoptada por el régimen norcoreano para amedrentar a la población e impedir que se movilice.
La legislación norcoreana establece la condena a pena de muerte por delitos como conspiración para derrocar al Gobierno, traición y terrorismo aunque Pyongyang también ha ordenado ejecuciones públicas por delitos menores como el activismo religioso, el uso de teléfonos móviles o el robo de comida.