VIENA 24 Jul. (Reuters/EP) -
El gobernador de la región austriaca de Vorarlberg (oeste), Markus Wallner, ha ordenado este martes que todos los hospitales públicos dejen de practicar la circuncisión, una medida adoptada días después de una decisión similar aprobada por un tribunal de Colonia (este de Alemania) sobre la prohibición de esta práctica.
Un portavoz de Wallner ha explicado que la decisión se ha tomado para detener las circuncisiones hasta que haya una ley estatal que regule esta tradición. La cadena austriaca ORF ha indicado que no es una práctica muy extendida en Vorarlberg.
El tribunal de Colonia prohibió esta práctica el mes pasado después de que un niño musulmán tuviese que acudir al hospital ya que no dejaba de sangrar por una circuncisión. El organismo judicial indicó que la práctica provoca dolor y que no podría llevarse en menores, solo en adultos que dieran su consentimiento.
Esta decisión afectaría a los dos millones de personas que viven en la región metropolitana de Colonia, donde habitan unos 120.000 musulmanes. El Gobierno alemán ha asegurado que trabaja de forma "urgente" para que las comunidades musulmanas y judías del país puedan realizar circuncisiones libremente a sus hijos ante las críticas de estas comunidades religiosas.
Para los judíos, el niño debe ser circuncidado a los ocho días de su nacimiento. Para los musulmanes, varía según la familia, país o credo del islam. El Gobierno alemán ha indicado que para otoño se aprobará una ley que regule las circuncisiones.