GINEBRA 14 May. (Reuters/EP) -
La jefa de la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Marianne Gasser, ha asegurado este lunes que los rebeldes sirios están divididos en cientos de grupos armados que controlan algunas zonas del norte del país, mientras que las fuerzas del régimen que preside Bashar al Assad parecen haber consolidado su control en la capital
Gasser, que abandonó Siria hace diez días tras completar su mandato como jefe de la delegación del CICR en ese país, ha afirmado que ha estado viendo desde abril signos de "mayor firmeza" por parte de las fuerzas gubernamentales en el entorno de Damasco.
En declaraciones a la prensa en Ginebra, ha afirmado que los intentos de entregar ayuda humanitaria en zonas controladas por rebeldes y fuerzas del régimen se topan con barricadas y otras medidas de bloqueo establecidas por diferentes grupos armados.
La Media Luna Roja Siria, la aliada del CICR en Siria, ha sido la principal organización en reparto de ayuda humanitaria de la ONU desde que comenzó el conflicto en Siria, a mediados de marzo de 2012.
"Sentimos que el Gobierno tiene más fuerza en Damasco y en el entorno rural de la capital porque ha sido un poco más difícil para nosotros obtener la autorización y había más puestos de control", ha asegurado Gasser. "Antes nos llevaba aproximadamente cuatro horas alcanzar Alepo (desde Damasco), ahora nos lleva casi dos días porque muchas carreteras están bloqueadas", ha explicado.
Gasser ha indicado que durante un viaje que hizo en marzo de Hama a Alepo observó a unos 30 grupos armados, de los cuales la mitad eran desconocidos para el personal del CICR y la Media Luna Roja. La jefa de la delegación del CICR en Siria ha reconocido que es muy difícil estimar el número de grupos armados en el país pero ha estimado que hay "unos cientos".
En este sentido, ha dicho que algunos de los grupos opositores más grandes, como el Frente de Liberación Islámica de Siria, son coaliciones que incluyen brigadas más pequeñas. El Frente al Nusra, identificable por su bandera negra, también se encuentra "muy, muy fragmentado", ha subrayado. Gasser ha hecho hincapié en que el elevado número y la variedad de los grupos opositores hacen difícil que se abran una negociación en el frente de de combate.
"A veces puede llevar más de dos semanas negociar con los dos bandos. Con los grupos armados puede que la mitad de ellos acepten mientras tienes que negociar con la otra mitad", ha resumido. "Incluso, cuando tienes luz verde de los dos bandos, tienes algunos grupos o francotiradores que no seguirán las instrucciones y que dispararán a cualquiera que intente cruzar", ha advertido.