ASUNCIÓN, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Salud Pública de Paraguay confirmó este lunes que unos 200 indígenas asentados en la localidad de Ytakyry, en el departamento de Alto Paraná (sureste), fueron "fumigados" con sustancias químicas vertidas por productores agropecuarios.
"Se ha constatado la efectiva intoxicación de miembros de las cinco comunidades indígenas asentadas en la localidad de Ytakyry, víctimas de haber sido fumigados desde un avión con sustancias tóxicas", señala un comunicado del ministerio divulgado por la prensa local.
Los técnicos de la Secretaría del Ambiente (Seam) visitaron la zona el pasado sábado, respondiendo a las denuncias de los indígenas de la comunidad ava guaraní que han asegurado que esto forma parte de una estrategia de los productores agropecuarios para expulsarles de esas tierras.
Los indígenas y los productores de soja de Brasil y Paraguay se disputan unas 3.000 hectáreas de esa zona de Alto Paraná. Tanto los agricultores como el Instituto Nacional del Indígena (INDI) dicen que tienen en su poder los títulos de propiedad de esos terrenos.
La ministra de Salud de Paraguay, Esperanza Martínez, ha acusado públicamente a los empresarios agrícolas de atentar contra el medio ambiente y contra la salud de los indígenas.
"Horas más tarde de haber sido agredidos, los afectados presentaron vómito, cefaleas y náuseas, de las que fueron atendidos por un grupo de sanitarios y voluntarios que fueron enviados al lugar para asistirles", indicó Martínez.
Ante esta delicada situación, el presidente paraguayo, Fernando Lugo, ha pedido a las autoridades competentes realizar una investigación para dar con los responsables de este hecho, informó el diario local 'ABC Color'.
La presidenta del INDI, Lida Acuña, reveló que el Ministerio de Salud tiene un vídeo que se hará público en las próximas horas que evidencia la "agresión" contra los nativos de esas zonas que ya han presentado varios denuncias contra los productores.
"Es un crimen que hechos de esta naturaleza sigan ocurriendo y que queden impunes. Incluso cabría aplicar el intento de genocidio porque hubo intención de dispersar a una comunidad de su territorio", indicó.
Los productores de soja han rechazado estas acusaciones a través de la abogada Nidia Silvero, quien insiste en que sus representados tiene los documentos de propiedad de los terrenos en disputa.