Rusia despliega un operación de seguridad ante los Juegos de Invierno

Actualizado: martes, 7 enero 2014 9:09

MADRID 7 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Rusia ha puesto este martes en marcha una de las mayores operaciones de seguridad en la historia de los Juegos Olímpicos a un mes vista del inicio de los Juegos de Invierno que se celebrarán en la localidad de Sochi.

"A partir del 7 de enero, todas las divisiones responsables de garantizar la seguridad de los invitados a los juegos serán puestas en alerta de combate", ha indicado el ministro de Situaciones de Emergencia, Vladimir Puchkov.

"Todas las instalaciones serán puestas bajo protección y se lanzará un sistema de monitorización espacial", ha agregado, antes de detallar que más de 30.000 efectivos serán desplegados en la zona, según ha recogido la cadena de televisión británica BBC.

Así, las autoridades establecerán dos zonas de seguridad, una de las cuales estará situada en los alrededores de los recintos y que tendrá como objetivo limitar el acceso a los mismos a las personas que tengan entradas y que se identifiquen debidamente, y otra que contemplará prohibiciones generales de movimiento.

Los vehículos no registrados y aquellos que no tengan una acreditación especial no podrán circular, mientras que la venta de armas, municiones y explosivos estará igualmente prohibida durante la celebración de los juegos.

La principal preocupación es la amenaza de posibles atentados por parte de la insurgencia islamista del Cáucaso Norte, temores que se han incrementado tras los atentados suicidas ejecutados en la localidad de Volgogrado los días 29 y 30 de diciembre, que se saldaron con la muerte de 34 personas. El señor de la guerra Doku Umarov, el hombre más buscado de Rusia, ha solicitado a sus combatientes que ataquen los Juegos Olímpicos de Invierno.

Umarov ha asumido la responsabilidad de los principales ataques terroristas de los últimos años en Rusia, entre los que se incluye el atentado perpetrado en enero de 2011 en el aeropuerto de Domodedovo, que dejó 37 fallecidos, y los dos atentados suicidas simultáneos cometidos en 2010 en el metro de Moscú, en los que fallecieron 40 personas.