MOSCÚ 28 Jun. (Reuters/EP) -
Moscú ha probado este martes de forma exitosa un nuevo misil intercontinental que pretende ser la punta de lanza del arsenal ruso para la próxima década, según ha confirmado el Ministerio de Defensa de Rusia. Estos artefactos pueden llegar a transportar un total de seis y diez cabezas nucleares, lo cual garantiza un impacto explosivo de hasta 100 veces mayor a la bomba atómica que estalló en Hiroshima en 1945
El misil, conocido como Bulava y que mide doce metros de largo, fue disparado desde un submarino de la clase Borei, una nueva generación de aparatos proyectados para el disparo de misiles Bulava específicamente. La prueba se ejecutó cerca de la frontera entre Rusia y Finlandia y el objetivo alcanzado estaba situado a cerca de 6.000 kilómetros de distancia, en la península de Kamchatcka (este).
"La ejecución fue exitosa en todos los aspectos", ha declarado el portavoz ruso, el coronel Igor Konashenkov, a la agencia Interfax, "el misil Bulava lanzó la cabeza del proyectil al área deseada".
No obstante, las autoridades rusas aún emprenderán cuatro pruebas más durante este año, antes de que apruebe su utilización por parte del Ejército durante el transcurso de 2011 o de cara al próximo año. Esto se debe a que, con anterioridad, los misiles Bulava fracasaron en catorce pruebas balísticas, lo que está cuestionando la ingente inversión realizada en este tipo de proyectil.
Estas pruebas también obedecen al plan de modernización del armamento ruso que será acometido durante los próximos diez años y cuyo coste, en palabras del primer ministro Vladimir Putin, será de unos 20 billones de rublos (casi 500.000 millones de euros).