Sáhara.- CEAS-Sáhara cree que García-Margallo empieza "mal" al no defender la independencia para el territorio

MADRID 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Coordinadora Estatal de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (CEAS-Sáhara) cree que el nuevo jefe de la diplomacia española, José Manuel García-Margallo, empieza "mal" al evitar defender la independencia del territorio en una reciente entrevista.

"No le dé miedo hablar claro, diga que la solución a la libre autodeterminación del pueblo saharaui se debe ejercer, según el derecho internacional, a través de un referéndum en el que una de las opciones sea la independencia, por supuesto", responde CEAS Sáhara a la entrevista publicada el domingo en 'El País'.

García-Margallo defendía en esa entrevista una solución política "justa, duradera y mutuamente aceptable, que prevea la libre autodeterminación del pueblo del Sáhara Occidental en el marco de la carta de Naciones Unidas", y señalaba que corresponde a las partes (Marruecos y el Polisario) acordar cómo se deje ejercer ese derecho de autodeterminación.

CEAS-Sáhara acusa al ministro de "ambigüedad controlada", al realizar unas declaraciones "sin contenido, poco claras" que olvidan lo que el programa electoral del PP recoge "sobre la responsabilidad histórica del Estado español".

A su juicio, García-Margallo, que añade en la entrevista que su postura sobre el Sáhara coincide con la que mantuvo el Gobierno anterior, "contradice" declaraciones anteriores pronunciadas por el jefe de gabinete de Mariano Rajoy, Jorge Moragas.

CEAS-Sáhara recuerda que Moragas ha afirmado que fue "absurdo" abandonar el principio de la neutralidad activa, "como hizo Zapatero", que "se alineó con las tesis francesas, más cercanas a las marroquíes".

También contradicen, insiste CEAS Sáhara, la postura expresada por el actual presidente del Senado, Pío García-Escudero, cuando ejercía como portavoz de la oposición en la legislatura pasada.

García-Escudero advirtió de que no era admisible esgrimir la defensa de los intereses españoles en Marruecos como "pretexto" para adoptar un "silencio cómplice" ante las "graves violaciones de los derechos humanos" en el Sahara Occidental.