Lamenta el retraso en la entrada en vigor del nuevo acuerdo agrícola y pide un "equilibrio identitario" para los inmigrantes
GRANADA, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha defendido hoy ante la UE una solución al contencioso "artificial" del Sáhara Occidental que se base en la propuesta de autonomía que el reino alauí ha ofrecido al Frente Polisario y Argelia y cuyas negociaciones permanecen estancadas desde 2008 en Naciones Unidas.
El monarca ha hecho una "llamada" al Frente Polisario y a Argelia para que respondan "a las llamadas del Consejo de Seguridad" y emprendan "el camino a un arreglo político al diferendo artificial" en torno a la "integridad territorial" de Marruecos, "sobre la base de la iniciativa marroquí de otorgar a la región del Sáhara una amplia autonomía en el marco de la soberanía del Reino y de su integridad nacional y territorial".
Lo cierto es que el Consejo de Seguridad ha pedido de forma reiterada a las partes que continúen las negociaciones "de buena fe y sin condiciones previas", como figura en la última resolución sobre el Sáhara de abril de 2009.
Este mensaje lo ha leído el primer ministro marroquí, Abbas el Fassi, a la delegación europea que representa a los Veintisiete en la primera cumbre entre la UE y Marruecos que se celebra desde ayer en Granada. Mohamed VI no ha acudido a Granada y, según fuentes diplomáticas, nunca se planteó su presencia porque el monarca no acude a este tipo de citas.
El rey reiteró además su "compromiso a favor de un relanzamiento serio y digno de credibilidad de la construcción del Magreb y de la edificación de un futuro común, fundado sobre el respeto de la soberanía de los Estados, de su integridad territorial y de las reglas de buena vecindad".
Marruecos, continúa el mensaje, "lamenta el retraso registrado" para la entrada en vigor del nuevo acuerdo agrícola y reafirma su "empeño de acelerar las medidas de ejecución del mismo, dentro del respeto de los compromisos comúnmente asumidos".
INMIGRANTES, VEHÍCULOS DE ENCUENTRO
El rey pide también ayudar a los inmigrantes marroquíes que residen en Europa para que encuentren "un equilibrio identitario que añada a la propia identidad del migrante nuevas dimensiones, sin que por ello le haga perder sus propias raíces. El objetivo común debe ser, añade, "erigir a las comunidades migradas en agentes que promueven los intercambios entre las dos riberas del Mediterráneo y en vehículo de encuentro cultural y humano".
Destacó que para Marruecos la celebración de esta primera cumbre en Granada constituye "un signo de buen augurio", ya que esta "monumental" ciudad supone "uno de los testimonios vivos de la fecunda simbiosis histórica, cultural y humana, operada entre las riberas del Mediterráneo", además de una "expresión de un armonioso mestizaje entre las culturas marroquí, española y europea".
El rey concluye su mensaje manifestando la aspiración del reino de "ver a Europa avanzar hacia Marruecos, para convertirse en su mejor socio, brindándole su apoyo tangible".
Las dos delegaciones se han reunido esta mañana durante dos horas en el Palacio Carlos V de la Alhambra de Granada. Encabezaron la delegación europea el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, cuyo país asume este semestre la presidencia del Consejo de la UE; el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.